La genética, el entorno o las costumbres: estos son los factores que influyen en el timbre de voz que tenemos
Los resultados de un estudio han aportado nuevas pruebas sobre las contribuciones de los factores genéticos y ambientales, que han sorprendido a los propios investigadores
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La voz es un elemento esencial en la identidad de una persona. Determina en muchos casos cómo se reconoce a una persona. En la radio, es la característica que diferencia a una persona de otra. Pero además puede hacer que incluso una persona reconozca el atractivo a través de una voz más grave, en el caso de los hombres, que otra.
Ante la importancia de esta cualidad individual, unos investigadores se han preguntado si la voz es algo que puede heredarse. Para ello, han escogido un grupo de 632 personas con una característica común: son todos gemelos. Pero se dividían en dos subgrupos. Uno de ellos son los gemelos monocigóticos, que son los que se desarrollan de un espermatozoide junto con un solo óvulo; de ellos nace un embrión que luego se divide en dos, por lo que son idénticos física y genéticamente. El otro grupo son los gemelos dicigóticos, que provienen de dos cigotos distintos que se han desarrollado al fecundarse dos óvulos por dos espermatozoides diferentes.
En el estudio se han analizado todas las cavidades que influyen en el habla: la boca, la nariz, la laringe y la faringe. El trabajo académico ha comprobado cómo influye la genética, el entorno o las costumbres. El estudio, que publica la revista 'Human Genetics', abre nuevas perspectivas para comprender la interacción entre la genética, el ambiente y la cultura que dan forma al tracto vocal.
La investigación ha sido dirigida por el investigador de la Facultad de Filología y Comunicación de la Universidad de Barcelona (UB) Dan Dediu y la catedrática de la Universidad Libre de Ámsterdam, Dorret Boomsma, que han destacado que, pese a su importancia para hablar, respirar y comer, existe poco conocimiento sobre la genética del tracto vocal humano.
El estudio, en el que han participado genetistas, neurocientíficos y lingüistas, se ha hecho a partir de los datos recogidos en cinco estudios de gemelos por el Registro de Gemelos de los Países Bajos, que incluía gemelos monocigóticos, que son casi genéticamente idénticos, y gemelos dicigóticos, que comparten de media el 50 % del genoma.
La investigadora Emily Jennings ha clarificado que "el análisis en los dos tipos de gemelos permite conocer la importancia de la genética y del entorno para explicar las diferencias entre personas en la anatomía del tracto vocal". Para medir los aspectos del tracto vocal que no son visibles de forma externa, los científicos analizaron imágenes de resonancias magnéticas en 3D, que captan las características anatómicas de las estructuras blandas y rígidas de todos los órganos que conforman la forma de hablar.
Durante seis meses marcaron las imágenes para identificar estructuras anatómicas definidas y describir curvas y superficies y obtuvieron medidas como distancias, ángulos, curvaturas o proporciones, que les permitían captar las dimensiones y forma de las estructuras del sistema vocal.
Resultados sorprendentes
Los resultados han aportado nuevas pruebas sobre las contribuciones de los factores genéticos y ambientales, que han sorprendido a los propios investigadores. "La posición de la laringe parece que está bajo una fuerte influencia genética, mientras que las arcadas dentales o la bóveda palaciega tienen una baja heredabilidad", han resumido los investigadores.
Según estudios anteriores, los tratamientos dentales, el tipo de dieta e incluso la costumbre de chuparse el dedo durante la infancia tienen un efecto notable en la estructura del tracto vocal. Sin embargo, "existen otras estructuras óseas, como la cavidad nasal y la mandíbula, que parecen ser bastante resistentes a estas influencias ambientales", han puntualizado los investigadores.
Estos resultados demuestran que la genética importa, pero que no lo controla todo, y que hay que buscar los mecanismos a través de los cuales interactúan la biología, el entorno y la cultura. La metodología y los programas desarrollados durante el estudio están disponibles de forma gratuita para cualquier investigador interesado, de modo que "cualquier grupo puede aplicar exactamente la misma metodología a sus muestras, lo que permite reproducir y ampliar nuestro estudio", ha señalado Dediu.
"Además -ha añadido el investigador-, este protocolo, elaborado para medir cuantitativamente el tracto vocal, podría ayudar en el futuro a identificar, diagnosticar y seguir patologías que afectan al tracto vocal".