Un hombre asesinado después de quedar con una mujer a la que había conocido a través de internet

José Antonio Delgado Fresnedo contactó con una mujer a través de Internet. Viajó desde Getxo hasta Zaragoza para conocerla. Pero ese contacto acabó con su muerte. La Guardia Civil ha detenido a dos personas sospechosas de su asesinato. La operación sigue abierta mientras los expertos advierten del peligro de las redes sociales o aplicaciones de contactos. Muchos delincuenten buscan en ellas a sus potenciales víctimas.

El pasado 6 de septiembre a José Antonio se le pierde la pista. Separado, de 54 años y con un hijo, conoce a una mujer a través de Internet. Viaja desde la localidad vizcaína de Getxo donde vive hasta Zaragoza para conocerla. En principio queda con ella en un lugar público, sin peligro aparente. Pero esa 'quedada' inicial pasa a otra ya en privado. Ella le propone un lugar apartado para mantener relaciones sexuales. Él accede. Pero cuando llega al sitio acordado es sorprendido al menos por un hombre que le golpea. La Guardia Civil investiga si el asaltante lo metió el maletero del coche de la víctima para trasladarlo a un campo de cultivo donde lo entierra. Dos días después un agricultor lo encontró. El sitio: el pueblo de Pedrola, situado a 35 minutos en coche de Zaragoza capital. Se cree que murió asfixiado porque había tierra en sus pulmones.

La denuncia de la familia de José Antonio que no sabía nada de él pone sobre la pista a la Guardia Civil que da con este hombre -de nacionalidad marroquí- y con la mujer usada como cebo -de origen venezolano- y acelera las pesquisas ante el temor de que huyan. A él lo controlan gracias a la pulsera GPS que lleva encima por una denuncia previa de violencia machista. Saben que vive en el pueblo porque tiene una nave alquilada en las afueras, en el polígono industrial de La Ermita. Nave en la que presuntamente trabaja limpiando coches y camiones. Por eso él es conocido. Ella se oculta, se esconde más. Él es el que sale a menudo a realizar compras. La investigación de la Benemérita da sus frutos: a José Antonio esta pareja le ha robado el dinero en metálico que llevaba encima, tarjetas bancarias -que podrían haber utilizado en otros pueblos cercanos- además del coche, un vehículo de alta gama con el que también querían lucrarse. Lo intentaron vender en Internet por la mitad de su valor -20 mil de los 50 mil euros que valía- pero el comprador denunció a la Guardia Civil que había sido víctima de una estafa: había entregado el dinero pero la pareja no le había entregado los papeles, la documentación del vehículo.

Podría haber más víctimas

Se cree que el método de esta pareja era ganarse la confianza de sus víctimas entre las que no solo estaría José Antonio. Hay al menos dos más que lograron salir con vida de este cebo mortal y lo han podido contar. Pero podrían ser más que no se hayan atrevido a denunciar por miedo o vergüenza.

La investigación sigue abierta, los detenidos están en la Comandancia de la Guardia Civil de Zaragoza y el cuerpo de José Antonio en el Instituto de Medicina Legal de Aragón. Los expertos consultados nos cuentan que hay que tener mucho cuidado con las redes sociales. Hay delincuentes preparados para actuar aprovechándose de la inocencia de sus potenciales víctimas.