84 horas a la deriva: La historia de Terry Jo, la única superviviente del homicidio múltiple del velero

Una familia humilde y trabajadora de Tennessee que consiguió sacar tiempo para unas vacaciones en barco. La superviviente pasó tres días y medio en el mar

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Alex García

Publicado el - Actualizado

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Navegando por los mares, los barcos y catamaranes tienden a encontrarse habitualmente con diferentes escenarios. Cada uno de ellos, dependiendo de la experiencia del capitán, serían más o menos complejos. Sin embargo, hay otras ocasiones en las que eso no funciona del todo así, y circunstancias en las que la peculiaridad hace acto de presencia e inunda por complejo los corazones de los marineros.

El Captain Theo, navegaba hacia Puerto Rico, cuando algo especial llamó su atención. Un gran destello iluminó sus miradas, y al acercarse contemplaron que no se trataba de un objeto, ni de una embarcación... Era una niña visiblemente aturdida y bronceada a consecuencia del sol. La mujer seguía viva y vestía con cierta elegancia, algo que hizo pensar a la tripulación que se trataba de una sirena. Sobreviviendo en un flotador rodeada de tiburones.

A la mayor brevedad posible, los miembros pertenecientes a la tripulación del barco construyeron una balsa con barriles vacíos y con la intención de rescatar a la joven. Finalmente y con gran tensión, el equipo de marineros griegos consiguió sacar a la niña de la deriva del océano y contemplar sus claros grados de deshidratación y su fiebre, que alcanzaba los 40 grados de temperatura. La muchacha decía llamarse Terry Jo Duperrault, que tenía once años y que provenía de la localidad de Green Day en Wisconsin. Luego, se desmayó. En ese momento, nadie conocía la pesadilla por la que había pasado, pero que a buen seguro llegaría a estremecerlos.

Los hechos ocurrieron hace sesenta años, a mitad de noviembre, en un día sorprendentemente caluros. La familia era de Wisconsin de toda la vida, y estaba compuesta por cuatro miembros. El padre era Arthur, que apenas entraba en la década de los 40, su mujer Jean, tenía 38. Ellos dos como pareja habían dado a luz a tres hijos; Brian que era el mayor con 14 años, Terry Jo de la que ya hemos hablado y que tenía 11, y por último Rene, con ocho.

El matrimonio llevaba tiempo ahorrando para poder tomarse un año sabático, aunque previamente lograron realizar un viaje en un velero alquilado desde Florida y hasta las Bahamas. Junto a ellos, la pareja contactó con un amigo; Julian Harvey, un marinero experimentado que se encargaría de llevar el barco. Su esposa Mary Dene, cocinaría para los huéspedes.

Todo transcurría con normalidad, hasta que decidieron navegar en la noche. Después de la cena, la pequeña Terry se fue a la cama, lo normal era que su madre le acompañara, pero esta vez, decidió quedarse junto al resto de su familia observando la noche. Cuando Terry se había dormido, de repente un grito la sobresaltó; asustada, se asomó a la calle, vio a su madre y a uno de sus hermanos en el suelo ensangrentados. Poco más adelante, su padre y su otro hermano también yacía sobre el parqué del velero. Sintió otro ruido, el casco de la embarcación se había abierto y el barco había empezado a hundirse. En ese momento vio a Julian Harvey, que con prisa, y su profunda y vacía mirada trataba de huir de la embarcación.

¿Por qué ocurrió?

El patrón del barco, Harvey, tenía la intención de cobrar una prestación de veinte mil euros de seguro de vida que tenía su mujer, Mary Dene, por eso planeó una idea para llevarlo a cabo. Teniendo en cuenta que era sencillo simular un ahogamiento, procuró realizárselo a la joven cuando irrumpió Arthur. Al encontrarse en esa situación tan compleja, Harvey asesinó a todos, excepto a la pequeña. El fraude y cobrar las pólizas eran lo suyo. Harvey era un estafador mortal dispuesto a cualquier cosa por conseguir dinero. Cuando se enteró de que Terry Jo seguía con vida, el asesino, víctima de la furia y el temor a pasar una vida entre rejas, se quitó la vida.