Puurs, el pueblo belga que va a salvar el mundo

Es una mañana fría en Puurs, una localidad de menos de 20.000 habitantes a 35 minutos de Bruselas. Tiene la particularidad de todos los pueblos flamencos del país. Sus calles están limpias, los escaparates de las tiendas decorados con gusto y sus vecinos visten bien aunque sola salgan a comprar el pan. Hasta hace poco este pueblo era conocido por la fabricación de la cerveza Duvel, de alta graduación y una de las más populares de Bélgica. De hecho, en todos los bares, ahora cerrados por la pandemia, hay carteles de esta cerveza mostrando con orgullo uno de los signos de identidad de la zona.

La historia no ha querido que Puurs sea conocido solo por su cerveza. A escasos dos kilómetros del centro del pueblo se encuentra la planta de Pfizer que en estos momentos está fabricando y distribuyendo la vacuna contra el coronavirus. Un vecino asegura que “no solo se fabrica cerveza y chocolote en la localidad, ahora también la vacuna que tanto necesita la humanidad”.

Los carteles azules con letras blancas de Pfizer se ven desde la carretera que une Bruselas con Amberes. Se ha multiplicado la seguridad en la planta tanto que está prohibido el acceso a todo el personal ajeno a la compañía. Además, un grupo de vigilantes de seguridad controla cualquier intento de grabar imágenes desde el exterior, salvo desde el otro lado de la calzada donde es misión imposible colocar un trípode en condiciones.

Se desconoce desde dónde salen los camiones que llevan estos días las vacunas hasta el Reino Unido, primer país que ha comenzado a vacunar a la población. De todas formas cada camión que sale de las instalaciones se ve con ilusión por acercarnos al final de esta pesadilla global. Puurs vive toda esta expectación con mucha serenidad. Sus calles se han convertido en pequeños platós de televisión donde participan vecinos sin queja alguna y cómo no el incombustible Alcalde. Koen Van den Heuvel asegura que Puurs es “el pueblo que va a salvar el mundo”, lo dice con orgullo consciente de la “importancia y la responsabilidad del momento”.

Una profesora del pueblo recuerda “que Pzifer no es ninguna novedad para ellos, que están familiarizados con esta farmacéutica porque trabajan 5.000 personas del pueblo. Lo que sí reconoce es que la vacuna ha despertado expectación por la importancia que tiene”. Puurs es un pueblo que ha hecho historia. Su Alcalde bromea pero asegura que “todo el mundo tiene que ir a visitarlo aunque sea una vez en la vida”.