El rompecabezas de Madrid: cómo encontrar piso a un precio decente en la capital

Con la nueva Ley de Vivienda aprobada, son muchos los que se preguntan qué va a cambiar para que el acceso a una vivienda sea más asequible.

ctv-af5-key-g2f0d3bbe9 1920

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

7 min lectura

Este mes creo que no. Este año no puedo permitirme comprar lotería de navidad. Ya no puedo ir a visitar a mi familia el fin de semana que quería. No puedo ir con mi novia al cine la semana que viene. Seguramente hayas dicho alguna de estas frases hace poco o en algún momento de tu vida. Imagina tener que pagar un alquiler que supone más del 50% de tu salario (eso sin contar los gastos añadidos de luz, por ejemplo), hacer la compra cada semana para poder comer, ir al trabajo o universidad y además, tener tiempo para ti. Si te sientes agobiado solo con imaginártelo, este es el día a día de muchas personas que viven en Madrid, y que buscar o estar viviendo en un piso con ese tipo de precios hace que todo sea más complicado.

El nuevo anteproyecto de la primera Ley de Vivienda en España se ha aprobado este martes en el Consejo de Ministros, una ley con muchos interrogantes y muchas incertidumbres. El Ejecutivo hará lo posible para que llegue lo antes posible al Congreso y avanzar en su tramitación parlamentaria, como indicó la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez. Lo cierto es que esta nueva ley o anteproyecto, ha puesto en tela de juicio un tema que para muchos ha sido, está siendo y será un rompecabezas constante: el precio de los alquileres, conseguir un alquiler a un precio decente y conseguir sobrevivir a ello.

Claves de la nueva ley

Antes de meternos de lleno en el "ajo", repasaremos qué puntos clave tiene esta nueva Ley de Vivienda, a quién puede afectar y cómo pueden regular los precios de los alquileres. En relación con el precio del alquiler, habrá una regulación en ellos, pero tan solo a aquellas personas que posean más de 10 viviendas. Tendrán que bajar los precios en base al índice de referencia de los precios en las "zonas tensionadas", una especie de estadística que hasta la fecha no concreta nada y que estará, de momento, en negociación. Esas "zonas tensionadas" serán definidas por las comunidades autónomas, por un tiempo máximo de tres años tras constatar que la renta de alquiler supera el 30% de los ingresos medios por hogar. Otro de los puntos clave será la degravación del IRPF, actualmente en un 60% por rendimiento neto del alquiler de vivienda habitual y que pasará a ser un 50%, y 90% en esas "zonas tensionadas". El recargo en el IBI de las viviendas vacías es otro de los aspectos que modificará la ley. Esta vez serán los ayuntamientos los que podrán aplicar un recargo del 50% en la cuota líquida del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) a los que sean de uso residencial y que estén desocupados sin ninguna justificación durante más de dos años. Podrá ser, además, del 100% si la vivienda está vacía más de tres años, y del 150% si un propietario posee varios bienes inmuebles desocupados en un mismo municipio.

Madrid dice no a la Ley de Vivienda

En el caso madrileño, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ya se ha posicionado al ver los primeros borradores "tambaleantes" de la nueva ley, y Madrid no la aplicará: "si depende de las comunidades autónomas, buscaremos cómo blindarnos ante estos planteamientos para poder defender a los ciudadanos", añadió Ayuso. Por otro lado, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, garantizó también que no subirá el IBI en la capital: "el Ayuntamiento de Madrid no aplicará el recargo y en caso de que se nos obligue, articularemos las medidas para que los madrileños disfruten de la rebaja del IBI", concluyó Almeida.

Gerardo Manrique es el propietario de un piso en el barrio “Puerta del Ángel” de Madrid, un piso de poco más de 70m2, en el cual viven cuatro estudiantes. “No creo que la intervención del mercado vaya a ser la solución al problema. Ya se ha demostrado en otros países e incluso en Cataluña que lo que hace es contraer la oferta y desincentivar a posibles inversores”, comentaba en relación con la nueva Ley de Vivienda que quiere sacar adelante el Gobierno de Sánchez. Cree que el camino del Ejecutivo no es el correcto y que con ese tipo de medidas, el problema y rompecabezas de Madrid, seguirá estando presente: “Yo en particular no tengo tantas viviendas (más de diez como dice el anteproyecto), pero los propietarios van a ser más reticentes a sacar sus viviendas a mercado, particularmente en esas ´zonas tensionadas´”. La realidad del asunto no queda solamente ahí, y es que son muchísimos los jóvenes que llegan cada año a la capital ya sea para estudiar o empezar a trabajar. Eduardo, un chico leonés de 22 años, llegó hace mes y medio a Madrid para realizar el Master en Ingeniería Aeroespacial, un nuevo cambio en su vida, la primera vez viviendo en la capital, pero con unos contras inesperados al comienzo de su experiencia: “Cuando estaba buscando piso no me imaginé, ni mucho menos, lo complicado que sería. Estoy haciendo prácticas en Fuenlabrada y estudiando en el centro, por lo que empecé a buscar piso a un precio asequible y que me viniese bien tanto para ir a trabajar como estudiar”. El problema empezaba antes de llegar a suelo madrileño, y los impedimentos iban creciendo: precio; ubicación; la cantidad de dinero que hay que desembolsar antes de entrar al mismo piso como la fianza (a veces de hasta tres meses); el pago al intermediario si es encuentras una vivienda a través de una inmobiliaria (el precio de un mes)… En resumen: muchos pagos por adelantado, un desembolso de dinero grande (que posiblemente no tenga y tenga que pedir ayuda a sus padres) y, en muchas ocasiones, sin ver el piso de forma presencial.

Entre el primer y segundo semestre de 2020 el precio de la vivienda experimentó un moderado descenso que se tradujo en una reducción del esfuerzo económico que debería asumir una persona joven asalariada y, al término del 2020, más de la mitad de la población de entre 16 y 29 años que vivía en una vivienda independiente (un 57,5%) optaba por un alquiler, según un estudio sobre la emancipación en el segundo semestre de 2020 realizado por el Consejo de la Juventud de España. Además (y muy atentos al dato), el coste teórico del alquiler para una persona joven en solitario suponía un 91,6% de su sueldo, un porcentaje que contrasta con el de la compra de un piso, con el que destinarías un 55,1% aproximadamente.

Idealista como primera opción para los jóvenes

La nueva ley ha puesto sobre la mesa todas estas preguntas e incertidumbres tanto de propietarios como de los jóvenes, y ha abierto de nuevo el tema del alquiler en Madrid. Francisco Iñareta es el portavoz de Idealista, una de las compañías españolas que ofrece a través de internet, la publicación y búsqueda de pisos, ya sea alquiler o compra. Al igual que Gerardo, creen que, con las medidas del anteproyecto, no se solucionará el problema que hay y que viene desde hace tiempo: “nosotros sostenemos que para contener las rentas y facilitar el acceso a la vivienda en alquiler hay que hacer aflorar más producto en el mercado. Las políticas restrictivas, tal y como ha pasado en otras capitales, pueden provocar el efecto contrario al deseado”. Además, son muchos los jóvenes que acuden a “Idealista” para encontrar piso, siendo así, la primera opción para muchos de ellos: “los jóvenes que buscan en Madrid, ya sea habitación compartida o vivienda completa, saben que Idealista es la mejor opción ya que es el lugar donde encontrarán la mayor oferta inmobiliaria del mercado”, recalcaba Francisco, y añadía que la situación puede seguir siendo la misma que ahora e incluso empeorar con la subida de los precios o producirse negociaciones al margen de la regulación debido a la previsible escasez de oferta.

Una cosa queda clara después de conocer, un poco más, en qué situación se encuentran aquellas personas a las que esta ley puede afectarles, y es que la solución no puede pasar por impedir y restringir a unos, y permitir y ayudar a otros. No puede haber vencedores y vencidos en un tema que, como hemos visto, es uno de los más importantes para poder avanzar como sociedad.