Toneladas de basura invaden las calles de Pamplona, ¿quién y cómo las limpia?
De promedio 250 operarios y 69 máquinas del servicio municipal de limpieza se encargan de mantener la higiene en las calles de la capital navarra durante los Sanfermines
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Los Sanfermines, que empezaron el 7 de julio y que acaban este sábado, son una de las fiestas más multitudinarias de España, con todo lo que ello conlleva. Pamplona multiplica por cinco su población habitual de apenas 200.000 habitantes.
Dispositivos de seguridad extraordinarios donde los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad se coordinan y un operativo de asistencia sanitaria juegan un papel imprescindible para que todas las celebraciones puedan tener lugar sin incidentes o proporcionando una respuesta rápida a cualquier vicisitud.
El trajín incesante de viandantes por el centro de la capital navarra y su alto consumo de comida y de, sobre todo, bebida en la vía pública conlleva que toneladas de basura de toda clase se acumulen en las calles y en las plazas de la ciudad, que al final del día cogen un color oscuro y un tacto extremadamente pegajoso que en ocasiones incluso dificulta caminar con normalidad.
Como el año pasado, en 2018 se ha mantenido el dispositivo de limpieza en barrios que, en esta ocasión, se ha visto reforzado, según el Ayuntamiento de Pamplona. Al finalizar más temprano las labores diarias en el Casco Antiguo, el servicio municipal se ha podido trasladar a otras zonas de menor intensidad festiva como Ensanches, Rochapea, Iturrama o San Juan, mejorando el estado general de limpieza de la ciudad. En cada jornada de San Fermín trabajan como promedio 250 operarios y 69 máquinas del servicio municipal de limpieza.
Según datos consistoriales, se han recogido 805.440 Kg de residuos hasta este jueves entre contenedores, papeleras y el barrido manual. De esta basura, ya se habría recuperado un 45,48% para su reciclaje. Los técnicos aseguran que ese porcentaje estaría vinculado a que cada vez se realiza la recogida de residuos de manera más eficiente por la colaboración entre Mancomunidad y Ayuntamiento. Por ejemplo, se está tratando de forma independiente el contenido de las papeleras rojas en las zonas en las que otros años se ha detectado la presencia masiva de envases.
También ha descendido la producción de basura en general, un 9,39% menos que en 2017. El consistorio asegura que ha sido así por haber realizado un trabajo más eficiente de recogida, la apuesta por el vaso reutilizable y el comportamiento cívico de la ciudadanía.