¿Qué debo hacer para que a mi perro no le afecte la desescalada?

Una vez que empiecen a pasar más tiempo solos, los canes pueden protagonizar alguna que otra ‘trastada’. Mejor tenerlas presentes para evitarlas a tiempo

¿Qué debo hacer para que a mi perro no le afecte la desescalada?

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Nuestras mascotas son más parecidas a nosotros de lo que pensamos. Y, por supuesto, también notarán la desescalada. ¿Cómo no van a hacerlo si pasaremos de estar casi todo el tiempo en casa a ir saliendo más a la calle de forma progresiva? Quienes más van a notar la llegada de la nueva normalidad van a ser, evidentemente, los animales de compañía por excelencia: los perros.

Los canes son el mejor amigo del hombre y, claro, nos echarán de menos cuando ya no podamos dedicarles tantas atenciones y cariños como durante el período de confinamiento. Quizá ese haya sido un error fatal: pasar a prestar mayor atención a nuestros perros y tener que reducirla poco a poco a partir de ahora.

No es de extrañar que los veterinarios consultados por marcas especializadas en los perros, como Barkyn, hayan recomendado mantener la rutina que siempre hemos tenido con nuestros perros también con el coronavirus de por medio. Es la mejor forma de que se adapten a los cambios que vayan viniendo de la mejor forma posible. Por eso, una de las cosas que deberíamos hacer mientras estemos en casa es pasar algunos ratos en una habitación distinta a aquella en la que se encuentre el perro. Por ejemplo, mientras teletrabajamos.

También es importante que intentemos mantener a raya, dentro de lo posible, al can. ¿Cómo? Con juegos y entrenamiento. Sobre todo, con lo segundo. Una manera de que nuestro perro tenga sus capacidades cognitivas a pleno rendimiento en tiempos de nueva normalidad es entrenarle tres veces a la semana entre cinco y 10 minutos. Si le enseñamos algún truco nuevo o le recordamos los que ya sabe para potenciarlos, el animal nos lo agradecerá en forma de mayor motivación.

Es la forma de evitar algunos comportamientos atípicos en nuestro perro. Quién sabe, quizá al empezar a quedarse solo más tiempo a partir de ahora pueda desarrollarlos. Y hay que alejarle de esa mala conducta, sobre todo para que no la tome por costumbre y abandone los buenos hábitos que le caractericen.

¿Qué debo hacer para que a mi perro no le afecte la desescalada?

Algunas trastadas postconfinamiento que pueden protagonizar los perros

Puede ocurrir que hayamos cocinado algo y que nos encontremos con que el perro se lo ha zampado (si lo tenía a su alcance) en algún momento de despiste por nuestra parte. Si es algo dulce, las probabilidades de que al perro le llame la atención el alimento aumentan de forma considerable.

También puede que le dé por los cables. Por eso, habrá que prestar atención a los de la nevera u otros electrodomésticos, al cargador del ordenador portátil… Además, es muy importante que mantengamos, siempre que podamos, las rutinas de paseo de nuestro perro. Se nos permite sacarlo de casa para que pueda hacer sus necesidades, así que no debería haber excusas (salvo fuerza mayor o inclemencias meteorológicas, por ejemplo) para que le saquemos a pasear tanto como de costumbre.

Es posible que a nuestro perro también le apetezca morder las plantas… ¡o comérselas! Sí, aunque nunca haya sentido una atracción especial por ellas. Deben ser cosas de la soledad, pero si tienes alguna planta a la que el perro pueda hincar el diente… Más vale que la escondas (sobre todo si tiene pinchos, como en el caso de los cactus).

Eso sí, todavía hay un ‘comestible’ más surrealista para los perros en el caso de que empiecen a quedarse solos más tiempos y el aburrimiento les consuma: los pintalabios. Hay que tener mucho ojo con ellos. Si el animal se apropia de uno y aprende a jugar con él, el resultado puede ser fatal tanto para ellos mismos como para tu casa.

Son algunas ‘trastadas’ que puede traer consigo la desescalada en lo que respecta a tu perro. Sin embargo, cada can es un mundo. Por tanto, también es posible que no notes cambios considerables en el tuyo a partir de ahora. Por si acaso, ya sabes qué precauciones puedes tomar y cómo actuar para que todo vaya tan bien como siempre.