Así es el TruCAM II, el radar más potente que la DGT ya está probando

La DGT tiene preparado un nuevo instrumento para luchar contra el exceso de velocidad en carretera. Se trata de un radar de última generación denominado TruCAM II que es capaz de medir a distancias entre 1,2 y 1,5 kilómetros y de llegar a captar velocidades por encima de los 300 km/h con un margen de error de apenas 2 km/h. Durante el Salón Internacional de la Movilidad Segura y Sostenible de 2019 se presentó, llegando a las carreteras españolas durante el pasado mes de julio. Algunos usuarios de las redes sociales lo han visto recientemente en el puente de la Universidad de Salamanca, en una avenida urbana con la velocidad limitada a 50 km/h.

El nuevo radar sigue ampliando la distancia máxima de medición mediante un sistema láser. También permite denunciar otro tipo de infracciones como conducción agresiva, distracciones a bordo o no llevar el cinturón de seguridad puesto. Dado su reducido tamaño y peso, mide 21 cm de longitud, 9,8 cm de ancho y 31,7 cm de altura y pesa apenas kilo y medio, puede incorporarse a un vehículo de vigilancia o llevarse en la mano.

La fiabilidad de su funcionamiento viene de la mano de un desarrollo muy avanzado, pues incorpora un sistema de autofoco dinámico que permite observar la matrícula con máxima nitidez, captura imágenes cada tres décimas de segundo y, gracias a que incorpora conectividad Ethernet y wifi, puede enviarlas en tiempo real para que se descarguen al momento desde cualquier ordenador de un agente de tráfico.

INMUNES A LOS INHIBIDORES

Además, estos aparatos son resistentes al polvo y agua, pueden operar en temperaturas que oscilan entre los -10ºC y los 60ºC y tienen una autonomía de entre ocho y diez horas. Otra de sus características es que son inmunes a los inhibidores de radares al incorporar un sistema de cifrado de datos, totalmente inviolable.

La empresa madrileña Tradesegur, fabricante del nuevo cinemómetro, define la TruCAM II como “un equipo láser portátil compacto con tecnología Lidiar capaz de medir la velocidad de vehículos en alejamiento y aproximación y documentar mediante fotografía la infracción de los vehículos que superan los límites predefinidos por el agente”. La firma, con sede en Alcobendas (Madrid), colabora también con los Ministerios de Defensa y de Interior, Guardia Civil de Tráfico, Cuerpo Nacional de Policía, Mossos d’Esquadra y Ertzaintza.

Lo cierto es que el exceso de velocidad se paga. La Dirección General de Tráfico (DGT) recaudó más de 182 millones de euros en 2019 por este concepto. Para luchar contra la velocidad inadecuada, el órgano encargado del tráfico en la red de carreteras españolas, con la excepción de Catalunya y el País Vasco, cuenta con 764 radares fijos y 548 móviles, a los que hay que añadir una flota de helicópteros y drones.