El aumento del estrés incide en las migrañas

El 12 por ciento de la población española sufre migrañas y los casos tienen tendencia a crecer debido por ejemplo al estrés que es uno de los desencadentes. También influyen la genética y otros factores como cuestiones hormonales, cambios metereológicos o el consumo de algunos alimentos o de alcohol.

Dolor lateral y agudo que a veces te impide hata moverte

Maria José tiene 47 años y desde hace 5 está en tratamiento por las migrañas que ha sufrido toda la vida y que la llevaron en varias ocasiones a ausentarse del trabajo o volverse a su casa “se te pone un dolor lateral que te pincha, te pincha, es un dolor lacerante que ni siquiera te puedes mover, te empieza a doler una mitad de la cabeza y agacharte y moverte cuesta mucho y duele”. En su caso acudió al médico de cabecera en el centro de salud y acertaron con el tratamiento “ si que es verdad que si te notas la pastilla se nota se nota”.

Afectan más a mujeres que hombres

Las migrañas afectan más a mujeres que hombres, el 75 por ciento frente al 25 por ciento, son además hereditarias como en el caso de Maria José que recuerda que también su madre las ha sufrido toda la vida.

Su intensidad las diferencia de los dolores de cabeza puntuales o de las “cefaleas tensionales” que sufren 7 de cada 10 personas en situaciones de cansancio y de falta de sueño.

Los más graves son las cefaleas en racimos considerada por los médicos como uno de los dolores más fuertes que puede sufrir un ser humano. Afectan al 0'06 por ciento de la población mundial según señalan desde la Asociación Cefaleas en Racimo Ayuda. 

150 tipos de dolores de cabeza

Y es que en total y según explica a COPE José Miguel Laínez, vicepresidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN) “hay 150 tipos de dolores de cabeza”. Lo fundamental recomienda es no automedicarse y acudir en un primer momento a su médico de cabecera y si persiste el dolor a un neurólogo.

En al menos 8 de cada diez casos la medicación es eficaz

Para quienes sufren cefaleas y migrañas hay solución y lo peor es aguantar el dolor sin recibir la medicación necesaria ya que puede cronificar la situación, lo que afecta a una de cada 20 personas de forma diaria o casi diaria. De hecho y según el doctor Laínez “hay un 80 ó 90 por ciento de pacientes que controlamos bastante bien aunque hay algunos casos excepcionales que exigen tratamientos un poco más agresivos”.

No automedicarse

Incluso con los casos más difíciles, los médicos se muestran esperanzadores con los nuevos tratamientos personalizados y incluso con la cirugía que ya se aplica para paliarlos con éxito. Para el Doctor Laínez “en este momento hay progresos, hay buenas soluciones para la mayoría de los pacientes y creo que lo que tienen que hacer es no auto medicarse y acudir al médico. Lo primero es obtener un diagnóstico y después seguir el tratamiento”.

Falta diagnóstico

El dolor de cabeza genera 14.000 nuevas consultadas cada mes en España. Una de cada cinco personas que acuden a un servicio de neurología lo hace en relación con una cefalea y las migrañas centran la mitad de las primeras consultas. El problema según los médicos es que las cefaleas están infratratadas. Un estudio del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (SEN)  calcula que el 25 por ciento de las personas con migraña nunca han consultado su dolencia con el médico y cifra en el 40 por ciento los pacientes sin diagnosticar. Y es que según su vicepresidente “en general la migraña hace sufrir pero no condiciona la supervivencia de la persona y realmente tiene un cierto estigma y no está reconocida su incidencia en el paciente que la sufre”.

Graves consecuencias y costes millonarios

Y es que más de 7 de cada diez personas con migraña tienen una discapacidad grave y el 14 por ciento moderada. De hecho la Organización Mundial de la Salud considera la migraña como una de de las 10 principales causas de discapacidad. 

Solo en España el dolor de cabeza provoca anualmente según datos de la Asociación Española de Pacientes con Cefaleas (AEPAC) la pérdida de cerca de 20 millones de jornadas laborales en España lo que equivale a un coste aproximado de 2.000 millones de euros.