INMIGRACIÓN MEDITERRÁNEO
Cinco años para el patrón de una patera en la que uno de sus ocupantes murió ahogado
Un hombre de 31 años y nacionalidad argelina ha sido condenado a cinco años de prisión por ser el patrón de una patera que trasladó a España a ocho migrantes, uno de los cuales murió ahogado durante un trayecto que duró 12 días y que acabó en las costas de Alicante.
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Un hombre de 31 años y nacionalidad argelina ha sido condenado a cinco años de prisión por ser el patrón de una patera que trasladó a España a ocho migrantes, uno de los cuales murió ahogado durante un trayecto que duró 12 días y que acabó en las costas de Alicante.
El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia de Alicante, que enjuició los hechos el pasado 25 de marzo, le ha impuesto la pena por un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal pero le absuelve de la acusación de homicidio imprudente por la muerte.
La sentencia, a la que ha tenido acceso EFE, considera probado que la embarcación, de 8 metros de eslora, partió de la costa de Entaya, en Argel, a las 4 horas del 4 de octubre de 2023 con los ocho ocupantes a bordo, al margen del procesado, en una expedición que carecía de medidas de seguridad y que tampoco disponía de provisión de alimentos y agua.
La travesía se prolongó durante 12 días, en los que los ocupantes no pudieron ni comer ni beber, lo que propició que uno de ellos se arrojase al mar ante su situación de desesperación.
El resto de ocupantes consiguió volver a subirlo a bordo de la patera, pero no pudieron hacer nada por salvarle la vida a pesar de que intentaron reanimarlo, con lo que acabó falleciendo por ahogamiento.
La sentencia detalla que, finalmente, la embarcación fue avistada y rescatada por Salvamento Marítimo a 35 millas de la costa el 16 de octubre, y que fue dirigida al puerto de Alicante.
El tribunal ha considerado que el procesado ejerció como patrón responsable de dirigir la embarcación a partir del relato ofrecido por varios de los ocupantes de la patera que colaboraron con la Policía bajo la condición de testigos protegidos. Sin embargo, no cree demostrado que el encausado fuese responsable de la muerte de uno de los viajeros, toda vez que la víctima se lanzó al agua por su propia voluntad.