Se hace viral la agresión de un joven a la propietaria de una tienda tras pedirle que se pusiese la mascarilla

Con el paso de las horas se está haciendo viral el vídeo, de casi un minuto de duración, protagonizado por un adolescente de apenas 18 años que hizo pedazos el escaparate de una tienda de ultramarinos de Granada después de que la propietaria del establecimiento le instara a colocarse la mascarilla anti-covid que es obligatoria para todos los españoles en caso de encontrarse en la calle o en un recinto privado. Un vídeo que puedes ver pinchando aquí.

Los hechos han tenido lugar en las últimas horas en la ciudad de Granada, uno de los territorios andaluces y de toda España más castigados por los efectos de la pandemia durante la segunda ola del otoño, de la que aún nos estamos recuperando. En el vídeo, que está circulando por las redes sociales y que ha publicado el diario local 'Ideal' de Granada se puede ver cómo el joven se encontraba con un grupo de chavales de, más o menos, su misma edad. Todos ellos se encontraban en la puerta de la tienda.

El adolescente agredió a la dueña de la tienda

La dueña, de origen chino, pidió al adolescente que se protegiera la cara con la mascarilla, ya que no la llevaba puesta incumpliendo con la normativa vigente. A partir de ese momento, el chico perdió los papeles y propinó multitud de insultos a la propietaria, sin motivo aparente. Sus amigos trataban de frenarle en la medida de lo posible, pero este no atendía a razones y mantenía su actitud violenta.

Lo peor fue el momento en el que agredió a la propietaria de la tienda. “¡Que te pego un puñetazo!”, llegó a amenazar el adolescente a la dueña, mientras sus colegas trataban de alejarle del negocio para evitar que el altercado fuese a más. Previamente, el agresor le agarró del brazo tratando de sacarla del establecimiento, aunque ella opuso resistencia.

La policía detuvo al agresor

Tras el incidente y destrozar el escaparate de la tienda, el agresor emprendió la huida para evitar ser pillado por la policía. Pero sus planes, por suerte, no salieron como él esperaba, y fue detenido por los agentes que llegaron al lugar de los hechos.

El adolescente también mostró su rechazo a la detención, agrediendo incluso a uno de los policías. Finalmente fue capturado por un presunto delito de atentado a agente de la autoridad y por daños a la propiedad.