Informe final

Víctor Laínez murió sin poder defenderse

Victor Laínez, el hombre fallecido en Zaragoza tras ser agredido por llevar unos tirantes con la bandera de España.

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El informe definitivo de la autopsia de Víctor Laínez, quien falleció tras ser golpeado por Rodrigo Lanza a raíz, supuestamente, de una discusión por los tirantes con la bandera de España confirma que la muerte se produjo a causa de un fuerte traumatismo craneoencefálico, pero no precisa si para aumentar la violencia y contundencia del golpe fue utilizado algún instrumento metálico.

Los forenses señalan en su informe que Laínez, de 58 años, falleció a causa de un traumatismo craneoencefálico severo en un lateral de su cabeza, sin aportar más datos.

El informe resalta, además, que las numerosas fracturas registradas en la cara de la víctima, tanto en nariz, maxilares como pómulos, no son compatibles con una caída sino que tienen otras causas posiblemente relacionadas con una agresión.

Por estos hechos, la titular del Juzgado de Instrucción nº 6 de Zaragoza decretó el ingreso en prisión del joven antisistema Rodrigo Lanza Huidobro, una agresión con resultado de muerte que los acusadores vincularon a un delito de odio hacia la víctima por sus simpatías políticas.

Laínez murió el 12 de diciembre de 2017, cuatro días después de ser presuntamente agredido por Rodrigo Lanza, quien reprochó previamente a su víctima llevar unos tirantes con los colores de la bandera española.

Las declaraciones de testigos recogidas en el sumario señalan que Lanza se acercó a la barra del bar para hablar con Laínez y le tachó de "nazi" y "facha", a lo que la víctima le contestó con una alusión al origen chileno del presunto agresor.

Ninguno de los testigos apreció que se produjera una pelea entre ambos a consecuencia de estos hechos, y uno de ellos precisó que vio como el procesado se acercaba por detrás y le propinaba un fuerte golpe en la cabeza.

Tras dar unos pasos, la víctima se derrumbó en el suelo, momento que, según este testigo, aprovechó Lanza para continuar con los golpes y terminar con una violenta patada.

La investigación no ha podido acreditar la afirmación hecha en su defensa por el procesado y uno de sus amigos para alegar que fue atacado por Laínez con una navaja y tuvo que defenderse, un arma que ningún otro testigo vio y que los agentes no pudieron localizar instantes después del suceso.

Este amigo ha comparecido de nuevo en el juzgado y ha reiterado sus declaraciones anteriores, divergentes con las realizadas por otros testigos, han informado las fuentes referidas.

En su primera comparecencia judicial, Lanza alegó que fue la víctima quien se aproximó a él para preguntarle de donde era, y que una vez que le contestó que era de origen chileno, le insultó llamándole "sudaca de mierda".

Para las acusaciones, la autopsia y los testigos apuntan a que Víctor Laínez fue atacado por la espalda y de forma sorpresiva, sin tener la oportunidad de defenderse de la presunta agresión.