Deepfakes: La tecnología que puede arruinar muchas vidas en los próximos años

Cada vez es más fácil y accesible falsificar vídeos que parecen totalmente reales

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Javier Martínez

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

El siguiente vídeo muestra al expresidente norteamericano Barack Obama diciendo cosas como que el actual presidente, Donald Trump es un completo pozo de mi...

El vídeo, realizado por el portal de noticias Buzzfeedmuestra al director y actor de cine Jordan Peele haciéndose pasar por el expresidente Obama de una manera absolutamente realista. Un vídeo que, si no se analiza con atención, es muy fácil que se nos cuele como una declaración real de Obama.

Sustituir digitalmente la cara de una persona para ponerla en el cuerpo de otra es algo que se lleva realizando en Hollywood durante décadas, especialmente para las escenas de acción y de sexo en las que algunas de las estrellas del cine y la televisión se niegan a participar. Uno de los ejemplos más claros de la utilización de esta tecnología se ve en una de las escenas más conocidas de la serie Juego de Tronos, en la que una de las protagonistas debe caminar desnuda por toda la ciudad. En aquel caso, la escena fue realizada por una doble de cuerpo y la cara de la actriz, una de las protagonistas, fue incluida digitalmente con posterioridad.

Precisamente, el mundo de la pornografía en internet es uno de los lugares donde está aflorando la aplicación de estas técnicas, conocidas como 'deepfakes' (mentiras profundas en inglés). Los vídeos en los que se inserta la cara de una actriz o cantante famosa en el cuerpo de una actriz pornográfica se multiplican en las redes. 

Este tipo de vídeos se han convertido en otro tipo de violencia sexual, especialmente contra las mujeres. Noelle Martin, una joven australiana, se ha convertido en una de las portavoces de la lucha contra estos ataques. Cuando tenía apenas 17 años, la chica se hizo un selfie ante el espejo y lo subió a su muro de Facebook. Alguien robó esa y otras fotografías, las editó digitalmente y las subió a diversas webs pornográficas. Noelle se dio cuenta de ello por casualidad, al introducir en google imágenes una foto suya y buscar las imágenes relacionadas. Cuando exigió a las webs que eliminaran las fotografías editadas, le pidieron dinero a cambio. Al ritmo al que está avanzando la tecnología, avisan los expertos, en muy poco tiempo, quizás meses, cualquier persona, sin necesidad de tener grandes conocimientos informáticos o mucho dinero, podrá crear vídeos de la persona que quiera, siempre que disponga de las suficientes fotografías (algo no muy difícil en la era de las redes sociales). 

Pero este no es el único riesgo de la tecnología deepfake. Volvemos al vídeo de Barack Obama. Los creadores de ese clip decidieron poner en boca del presidente palabras relativamente "inofensivas". Pero piensa las consecuencias que puede tener difundir vídeos de políticos diciendo lo que sus enemigos quieran que digan. ¿Podría crearse un vídeo de Trump declarando la guerra a Corea del Norte? ¿Putin anunciando un bombardeo en Ucrania? En el mejor de los casos, profundizaríamos aún más en un problema que ya está presente y que resulta muy preocupante en la sociedad del Siglo XXI: la dificultad para distinguir las noticias reales de las falsas. Y en el peor, bueno, en el peor podría desatarse el pánico social en ciudades o países enteros.