Jordi Cruz, de 'MasterChef', revela su truco para hacer el pollo asado más jugoso: paso a paso

Si hay un plato que suele gustar en todas las casas, ese es el pollo asado. Pero, como en cada receta, cada maestrillo tiene su librillo y cada uno lo prepara a su manera. El chef, Jordi Cruz, conocido por ser jurado del talent de cocina de TVE, 'MasterChef', ha explicado cómo prepara esta receta y los trucos que tiene para que le quede jugosa y sabrosa.

En primer lugar, destaca el peso, la temperatura y las plumas del animal. En cuanto al peso, el cocinero recomienda que pese entre un kilo 200 gramos y un kilo 400, ya que, si tiene más peso, costará más que se cocine y es más probable que nos quede seco. También aconseja sacar el pollo de la nevera tres o cuatro horas antes de ir a asarlo para que tarde menos en hacerse, al estar menos frío y porque así dejaremos más tiempo reposar el adobo. Por otro lado, es muy importante retirar cualquier resto de plumas o pelos que pueda tener el animal.

El adobo, clave en la receta de pollo asado de Jordi Cruz

El adobo es una pieza clave en esta receta. Primero añadimos la sal, tanto por fuera como por dentro y, más tarde, un buen chorro de aceite, que debe impregnarse por las dos caras. Después es el turno de añadir una mezcla de hierbas secas en polvo, entre las cuales añade pimienta negra molida, romero seco, tomillo, hierbas provenzales y albahaca, embadurnando bien el pollo. Jordi Cruz también utiliza medio limón, que exprime encima del pollo y después introduce en el animal, junto con laurel, romero y tomillo. Por último, debemos atar las patas con hilo de brida y tapar la el pollo con film durante varias horas, antes de meterla en el horno.

Claves para hornear el pollo

Por un lado, es importante cómo colocarlo en el horno. El jurado de 'MasterChef' apuesta por utilizar una fuente y apoyarla en la bandeja del horno, con cierta inclinación para que resbale el jugo. La posición de la pieza en sí misma también hay que tenerla en cuenta, en este caso, Cruz recomienza poner la pechuga hacia abajo, para que se haga algo menos y no quede seca. Cuando el pollo lleve una hora en el horno, debemos darle la vuelta.

Hay que precalentar el horno durante 15 minutos y, cuando metemos el pollo, ponerlo a 180 grados, utilizando el ventilador y con calor tanto por arriba como por abajo. Este paso dura una hora, en la que no debemos hacer nada. Pasados los 60 minutos, tenemos que darle la vuelta y regarlo un poco con los jugos que ya haya soltado. Por último, lo dejamos otros 30 minutos dentro del horno y listo para comer.