Esplá: "El toro se ha vuelto más previsible y eso le quita emoción al toreo"

Las “XIX Jornadas Taurinas” de Villaseca de la Sagra arrancaron con la presencia del maestro alicantino Luis Francisco Esplá ante un “no hay billetes” en el Salón de Actos Municipal.

Bajo el título “Luis Francisco Esplá: el arte de la tauromaquia” y con la periodista de Antena 3 Elena Salamanca ejerciendo de moderadora el torero fue disertando sobre el toreo a través del recuerdo de su amplia y exitosa carrera profesional.

Comenzó destacando su añoranza del toro pero no de todo aquello que acarreaba como la popularidad aunque señaló la necesidad de que los toreros se vuelvan a acercar al público.

Una Carrera de Magisterio Taurino

Sobre su carrera indicó que la fue viviendo en diferentes etapas que partieron con la dura rivalidad de su llegada a los ruedos (etapa en la que coincidió con veinte grandes figuras en una dura rivalidad que ahora echa en falta), el exitoso período de la Movida madrileña con los intelectuales llegando de nuevo al toro, su salida del cartel de toreros banderilleros para probar nuevos caminos en los 90 y una última etapa en la que más disfrutó de su madurez torera pese a ser la época en la que fue más castigado por los toros.

La caída del toreo en Barcelona

Especialmente didáctica fue su exposición sobre la caída de la tauromaquia en Barcelona explicando que el aficionado catalán se marchó al suavizarse el espectáculo tras la Guerra Civil y el aficionado charnego, el que quedó tras la marcha del catalán, terminó de dejar vacía a una ciudad de gran tradición taurina con la llegada del espectáculo para turistas. No dudó a la hora de indicar que Barcelona estaba ya condenada a muerte.

Defensor de la muerte del toro en el ruedo como respeto al mito

Preguntado sobre las demandas de los antitaurinos en aspectos como el menor número de descabellos fue rotundo al afirmar que cualquier cesión sería quitar esencia al toreo y solo sería el paso previo de más derrotas. Muy firme fue a la hora de defender la muerte del toro en el ruedo como respeto hacia el animal.

Favorable al bombo en momentos especiales

Preguntado sobre el bombo el torero señaló que su apoderado, Manuel Cisneros, fue el inventor de un bombo que Simón Casas ha llevado acabo. Para él es algo positivo en lugares puntuales como Madrid y en momentos especiales pero no lo considera adecuado ya que los privilegios ganados en el ruedo quedarían perdidos en los despachos con el bombo.

En los instantes finales afirmó que el toro se ha vuelto más previsible y que eso ha quitado emoción al toreo.

En el turno de preguntas criticó el que “un señor” dirija una tauromaquia endogámica y previsible en la que se ha liquidado la figura del empresario de los pueblos. Defendió el modelo francés y su libertad.