¿Por qué se prohíben los toros en Madrid y no otro tipo de espectáculos?

El sector afronta, entre la indignación y la resignación, una medida que parece poner fin a lo que restaba de temporada taurina en la capital española

Isabel Díaz Ayuso con un capote en la plaza de toros de Las Ventas

Millán Cámara

Publicado el - Actualizado

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El sector de la tauromaquia está que trina este viernes. Las nuevas medidas de la Comunidad de Madrid para luchar contra el coronavirus atentan directamente contra sus integrantes: se prohíben los festejos taurinos en la capital española. Es decir, la fiesta nacional se queda sin la joya de su corona, con Las Ventas como gran estandarte.

Hasta ahora, las corridas de toros o eventos similares podían celebrarse en Madrid siempre y cuando el público asistente no superase el 75% del aforo (600 personas). Ahora quedan suspendidos desde el 7 de septiembre y con “una vigencia inicial de 15 días”, ya que las medidas anti-COVID se revisarán de forma periódica. En la práctica, estamos ante el final de la temporada madrileña, que ya venía anticipándose desde hace unos días.

La suspensión de los festejos previstos en Alcalá de Henares el 28 y 29 de agosto marcó las cancelaciones que vendrían después: Aranjuez, San Sebastián de los Reyes, Valdetorres del Jarama y Navas del Rey. El motivo esgrimido para la prohibición taurina madrileña por parte de la Delegación de Sanidad Pública es el conocido por todos: frenar la propagación del COVID-19 una vez finalizadas las vacaciones de verano.

Una de las posibles causas de la indignación con la medida la encontramos en el hecho de que la prohibición es absolutamente local: desde el fin del estado de alarma, son las autonomías, los ayuntamientos y los organizadores de eventos los responsables de asegurar el cumplimiento de las medidas derivadas de la nueva normalidad. Por eso en Andalucía y Castilla-La Mancha sí hay previstos varios festejos en septiembre.

También molesta sobremanera que eventos más multitudinarios como los conciertos vayan a seguir llevándose a cabo en Madrid. Desde la publicación especializada Mundotoro se pone el ejemplo del Madriz Summer Fest: unas 2.000 personas de aforo en nueve conciertos celebrados bajo techo y con las mismas medidas de seguridad que vienen aplicándose en las plazas de toros.

Aún existe la posibilidad de que se puedan organizar festejos en otoño e invierno, gracias a los recintos cerrados con los que cuenta la Comunidad para ello. Eso sí, sin respetar las fechas tradicionales y siempre que la evolución de la pandemia resulte favorable.

¿Por qué se prohíben los toros en Madrid y no otro tipo de espectáculos?

Posturas encontradas

A pesar de que la noticia no es positiva para nadie relacionado con el mundo taurino de Madrid, hay pareceres distintos sobre la imposibilidad actual de ver festejos allí.

Por un lado, está la contrariedad más absoluta con la prohibición, que ejemplifica el empresario Jorge Arellano: “Esa decisión no tiene ningún sentido en un espectáculo en el que, hasta el momento, en todos los celebrados en el resto de España, no se ha registrado ningún foco de contagio entre los espectadores, que han sido miles […] Lo más chocante de todo es que esta medida drástica y sin sentido la haya tomado un gobierno como el de Madrid, que dice que abandera la defensa de la tauromaquia y que además recibe de ella cada año varios millones de euros por el arriendo de la plaza de Las Ventas”.

La posición de Arellano y de otros compañeros de profesión es tan crítica quizá también porque los hechos contrastan con lo prometido en su día por la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso: reabrir Las Ventas para la Feria de Otoño.

¿Por qué se prohíben los toros en Madrid y no otro tipo de espectáculos?

Sin embargo, es una postura conciliadora la que llega precisamente desde la propiedad del coso más famoso de España, que ostenta Rafael García Garrido. “Evidentemente, a todos nos duele esta situación, pero por encima de todo está el problema sanitario, y es una evidencia que Madrid ahora mismo atraviesa una situación más complicada que otras regiones”, ha afirmado sobre la decisión.

Hace un mes, la opinión de García Garrido anticipaba lo que ha ocurrido en última instancia: “Esas nuevas medidas dejan todavía muchas sombras de dudas, porque hay que mantener la distancia de seguridad y evitar aglomeraciones, y eso es imposible de garantizar en las plazas de toros, por su antigüedad y estilo arquitectónico. Es cierto que esa exigencia se puede suplir con el uso de mascarillas, pero así y todo lo vemos muy complicado, porque en los toros la gente bebe, fuma, habla […] Deberíamos volver a dar toros sólo cuando haya una vacuna”.

A día de hoy, no habrá toros en Madrid hasta nueva orden. Y, como en el resto de actividades, el sector tendrá que adaptarse como pueda a un virus que, aunque algunos llegasen a negarlo, nos ha cambiado la vida.