16ª GIRA DE RECONSTRUCCIÓN
Sangre, triunfo y lágrimas de Francisco Montero en la matinal de Herrera del Duque
El novillero gaditano firmó una actuación entregada y cortó tres orejas. El salmantino Manuel Diosleguarde paseó una oreja de cada uno de sus novillos.
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Quedó atrás la lluvia vivida este sábado y asomó el sol en la matinal de Herrera del Duque. La segunda novillada de la Gira de Reconstrucción tuvo un nombre propio, el de Francisco Montero, que con su punto de histrionismo, cuajó una mañana plena de disposición en la que cortó tres orejas y se llevó una cornada.
Montero fue todo ganas en su primero. No todo le salió bien, pero la disposición es innegable. Recibió al novillo por saltilleras en el centro del ruedo y remató el saludo con una larga a una mano. Inició de rodillas la faena de muleta toreando al natural y continúo por ese mismo palo y manera en otra serie más tropezada. Después mostró su versión más reposada cuando se incorporó. Tres tandas en redondo de limpio y templado trazo aprovechando la nobleza del novillo de El Pilar. Pinchó antes de agarrar una estocada arriba, lo que le valió a Montero para cortar la primera oreja de la mañana.
El tercero, el gaditano le saludó con dos faroles de rodillas con el capote de paseo. Del segundo lance salió trompicado y se llevó una fuerte paliza en el suelo. Montero no se arredró y porfió con disposición ante un astado brusco que prendió en banderillas al banderillero Ignacio Martín y después al propio Montero cuando le pasaba de muleta. En KO técnico y una visible cornada en la pierna izquierda, el novillero volvió a la cara del novillo para trenzar una postrera tanda en redondo de mucho mérito. Se volcó sobre el morillo para dejar una estocada arriba. Recogió las dos orejas de premio entre lágrimas antes de pasar a la enfermería.
El primer utrero del lote de Manuel Diosleguarde se mató tras estrellarse contra las tablas nada más salir al ruedo. El descobillado sobrero que saltó en su lugar fue un animal flojo pero a más durante su lidia que puso en apuros en banderillas al subalterno José Andrés Gonzalo. El novillero salmantino se afanó en una labor templada, intentando primero sostener al novillo para después apretarlo más en serien en redondo de mano baja. La estocada, atravesada, tumbó al animal y Diosleguarde pudo pasear una oreja.
El cuarto fue un torito por cuajo y seriedad. Novillo que no fue fácil por su punto de casta y con el que el novillero charro estuvo firme y serio, alargando las embestidas y llevando muy toreado al pupilo de Moisés Fraile. La espada viajó al sótano, pero no importó para que pasease un trofeo más.
Herrera del Duque (Badajoz), domingo 15 de noviembre de 2020. Matinal. 16ª de la Gira de Reconstrucción. Un centenar de espectadores.
Novillos de
, el segundo como sobrero, bien presentados pero desiguales de hechuras. Más cuajados los dos últimos. Noble y de buen juego el primero; flojo pero a más el segundo, complicado el tercero y encastado el cuarto.
Francisco Montero, oreja y dos orejas.
Manuel Diosleguarde, que sustituía a Fernando Plaza, oreja y oreja.
Parte médico de Francisco Montero: "Herida inciso contusa en la cara interna del muslo izquierdo de unos 12 centímetros, que contunde el músculo, con un trayecto descendente de unos 10 centímetros y que diseca en abanico el tejido celular subcutáneo, sin afectar vasos ni músculos. Pronóstico grave".