ARÉVALO (ÁVILA)

Triunfo de Morante, Manzanares y Ureña con el ya habitual indulto de Garcigrande

Triunfal festejo el celebrado este sábado en Arévalo con el corte de un total de nueve orejas y un rabo y el indulto de 'Figura' de Garcigrande.

Paco Ureña, José María Manzanares y Morante de la Puebla en su salida a hombros en Arévalo

Sixto Naranjo Sanchidrian

Publicado el - Actualizado

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Tarde triunfal la vivida este sábado en el primer festejo de la Feria de San Victorino de Arévalo en el que el público disfrutó del buen toreo de Morante, de la espada de un entonado Manzanares y del gran momento de Paco Ureña. Y todo, aderezado con el ya habitual indulto de un toro de Garcigrande en esta plaza. Algo ya que se repite casi año a año. 

Abrió plaza un ejemplar de Garcigrande con el que Morante de la Puebla se gustó tanto en el recibo a la verónica como en el posterior quite por chicuelinas. Volando el capote y ciñéndose la embestida del toro con compás. El animal tuvo una nobleza lastrada por su falta de motor. Estuvo esforzado el sevillano, poniendo la sal que le faltaban a los viajes de su oponente. Faena basada en la mano derecha que concluyó de una estocada desprendida pero eficaz. La oreja cayó por mayoría de pañuelos.

Tuvieron enjundia y empaque las verónicas de saludo de José María Manzanares al primer toro de su lote. El de Garcigrande rompió a bueno en el tercio de muleta. Al principio algo envarado y tenso, el alicantino desentumeció las muñecas y logró naturales de notable trazo. Los de pecho, larguísimos. Y el toro a más cuanto más le apretaba Manzanares por abajo. Con la espada lo tumbó de un soberbio estoconazo en la suerte de recibir. Marca de la casa. Inapelable. Dos oreja paseó para asegurarse la puerta grande. 

No gustó en los tendidos que el primero de Juan Pedro Domecq abrochase tanto la cuerna por delante. Le restaba entidad a las buenas hechuras. Paco Ureña lo bordó en un saludo por gaoneras. Ceñimiento y suavidad en los lances. Como en un posterior galleo para llevar al animal al caballo. El toro dentro de su bondad siempre quiso salirse suelto de las suertes. Eso impidió la ligazón y la continuidad a la faena del murciano, que se mostró muy por encima de su oponente. Una estocada perpendicular dio paso al corte de una oreja.

Quedó casi inédito con el capote Morante ante el cuarto de Juan Pedro, un animal medido de raza pero de una gran clase y nobleza. Lo acarició el de La Puebla en una faena templada y medida que inició con unos ayudados por bajo que aunaron sabor y torería. Tandas cortas pero preñadas de gusto y gran trazo. Morante estuvo a gusto y eso se notó. No importo que la espada viajase caída para pasear la oreja que necesitaba para la salida a hombros.

El quinto de Juan Pedro también abrochaba demasiado. En el último tercio tuvo movilidad y la aprovechó Manzanares para firmar una faena a más. El empaque habitual del alicantino salió a flote para llegar a un tendido que se rindió de nuevo a la eficacia estoqueadora. Otras dos orejas sumó el diestro.

Pero para el fin de fiesta estaba reservado 'Figura', un ejemplar de Garcigrande de hechuras algo bastas pero que resultó una máquina de embestir en la muleta de Paco Ureña. El de Lorca se explayó en un trasteo de gran mando. Al natural los muletazos acababan casi en redondos, llevándolo hasta donde daba la cadera. Todo por abajo, de una profundidad asfixiante. Faena siempre a más con un final en el que se intuía que podía acaba con el perdón de la vida del toro. Algo que sucedió sin que la presidencia se diese mucha coba. Ureña paseó los máximos trofeos con total merecimiento.

Arévalo (Ávila), sábado 6 de julio de 2019. 1ª de Feria. Casi tres cuartos.

Tres toros de 

(1º, 2º y 6º) y tres de 

 (3º, 4º y 5º), de amable presentación, excesivamente brochos los de Juan Pedro. Destacó el encastado 2º y sobre todo el 6º, "Figura", número 73, de 487 kilos, negro listón y nacido en marzo de 2015, que fue indultado. El resto, bajos de casta aunque manejables.

Morante de la Puebla, oreja y oreja tras aviso.

José María Manzanares, dos orejas y dos orejas.

Paco Ureña, oreja y dos orejas y rabo simbólicos tras indulto.