ZARAGOZA
Diego Ventura cierra la Feria del Pilar cortando su tercer rabo en la Misericordia
El rejoneador cerró el ciclo maño saliendo a hombros del coso de La Misericordia tras cortar cuatro orejas y un rabo.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Con todo, la actuación premiada de nuevo con el máximo premio posible fue la menos redonda de las tres, en tanto que, a pesar de su garra y su espectacularidad de fábrica, la faena de Ventura tuvo varias lagunas y fases deslucidas que la presidencia prefirió obviar para atender la clamorosa petición del público.
De hecho, ya de inicio extrañó que el jinete de la Puebla del Río castigara excesivamente con un segundo rejón al claro y noble, pero a todas luces flojito, toro de Los Espartales, en un error de planteamiento que restó emoción, fuerza y recorrido a sus embestidas.
Con el toro parándose y sin seguir apenas a las cabalgaduras, tuvo Ventura que llegarle mucho para clavar y para adornarse en la suerte de la "hermosina", pasando la grupa de sus monturas de pitón a pitón. E incluso vio como en ocasiones el astado se derrumbaba sin remedio a los pies de sus caballos, desluciendo por momentos su trabajo.
Pero el siempre entusiasta y bonancible público de los rejones no tuvo reparos en seguir aplaudiendo con entrega a un jinete que le aseguró el espectáculo fuera de las suertes, remontando así su desigual ajuste y acierto a la hora de clavar banderillas.
Y tras un despegado par a dos manos, guiando sin cabezal a "Bronce", desde el tendido surgió incluso una preciosa jota dedicada al sevillano que terminó por caldear los ánimos para que se produjera esa unánime petición de rabo, una vez que Ventura fulminó al de Los Espartales de un certero rejonazo.
También tuvo sus altibajos su trasteo con el buen segundo, con alguna pasada de más y también fallos al clavar, solo que los galopes de costado, con los pitones prácticamente pegados al estribo, resultaron magistrales al ritmar el galope del toro y del valiente "Nazarí", y la ligazón en carrusel de tres banderillas cortas al violín llevaron al corte de esas primeras dos orejas de la triunfal tarde de Ventura.
Una paseó, por su parte, Rui Fernandes, que ejerció con limpieza y elegancia su labor de telonero del rejoneador estrella. Templado y correcto, dentro de su clasicismo lusitano, solo falló repetidamente con los aceros de muerte en su primero, pero no así con el basto y apagado cuarto, al que mató a la primera -de ahí el trofeo- entrando con frontal pureza.
Y otra oreja más, en tarde de diversión en familia, le dieron al aragonés Mario Pérez Langa, como premio a una labor tan voluntariosa como nerviosa frente al anovillado toro de Los Espartales que salió en tercer lugar.
Pero esos mismos nervios, acrecentados en su afán de estar a la altura tras el bombazo de Ventura, le jugaron constantes malas pasadas con el sexto, un fino, bravo y enclasado toro de Sánchez y Sánchez que le tropezó sin excepción a todos los caballos que sacó al ruedo.
Al joven jinete de Calatayud le faltó temple y ajuste en su tenso rejoneo para gobernar a un bravo ejemplar que, crecido, dueño del ruedo, llegó incluso a derribarle a él y a su caballo "Brasil" bajo las tablas de chiqueros, en un aparatoso percance del que ambos salieron milagrosamente ilesos.
Zaragoza, domingo 16 de octubre de 2022. 10ª de Feria. Lleno.
Tres toros de
(1º, 2º y 6º) y tres de
(3º, 4º y 5º), despuntados para rejones, de muy desigual presentación y seriedad. En cuanto a juego, destacaron los de Sánchez y Sánchez por su nobleza y calidad, con un sexto bravo y con clase. El resto, de escasa raza y fuerzas.
Rui Fernandes, silencio tras dos aviso y oreja.
Diego Ventura, dos orejas y dos orejas y rabo.
Mario Pérez Langa, oreja y vuelta al ruedo.