Jorge Molina y García Pulido, a hombros con buenos 'montealtos' en Villaseca

En el cuarto festejo del 'Alfarero de Oro' de Villaseca de la Sagra (Toledo), los novilleros Jorge Molina y Guillermo García Pulido, que salieron a hombros, cuajaron este jueves una gran actuación en la feria de Villaseca de la Sagra ante utreros de Montealto con trapío de auténticos toros. Ambos cortaron las dos orejas a los novillos lidiados en cuarto y quinto lugar, este último premiado con la vuelta al ruedo. Con casi lleno en los tendidos, completó el cartel Tristán Barroso, que fue silenciado en su lote.

En la localidad murciana de Calasparra, Mario Arruza, Lalo de María y Marcos del Rincón empataron a una oreja en la cuarta novillada de la Feria Espiga de Oro de Calasparra y en la que el segundo ha sufrido una voltereta que le ha llevado al hospital. Con tres cuartos de plaza se han lidiado novillos de la ganadería de Pedrés, de impecable presentación, bien armados, manejables y de buen juego, excepto el cuarto, deslucido.

El mexicano Brulo Aloi triunfó este jueves en la localidad abulense de Sotillo de la Adrada ante sendos novillos de Monte La Emita y Antonio San Román, ganadería esta a la que también pertenecieron los lidiados en primero, segundo y cuarto lugares. Con estos otros, y ante un aforo cubierto en sus tres cuarta partes, Rafael Reyes fue silenciado y Pablo Páez escuchó los tres avisos y fue abroncado tras haber dado antes la vuelta al ruedo en el primero de su lote.

En la novillada de Pozuelo de Alarcón (Madrid) se lidiaron, con media entrada de público, cuatro utreros de Torrenueva con los que José Rojo y Sergio Rodríguez obtuvieron un idéntico balance de ovación y una oreja.

En Peralta (Navarra) los novillos pertenecieron a la divisa local de El Pincha, y fueron lidiados por Álvaro Seseña (ovación en ambos), Diego Bastos (ovación y una oreja) y Alejandro Chicharro (vuelta al ruedo y ovación).

Por último, en Villarrubia de Santiago (Toledo) llegaron a salir al ruedo hasta cinco ejemplares de La Campana, en tanto que, al inutilizarse el primero durante la lidia, el ayuntamiento decidió regalar el sobrero para contentar al público que cubrió los tendidos en algo más de su mitad. De tal forma, Manolo Vázquez estoqueó tres, cortando una oreja a su segundo, y Miguel Serrano dos, para obtener del cuarto los dos trofeos que le valieron para salir a hombros.