FERIA DE LA VIRGEN DEL MAR
El Juli triunfa a base de raza con deslucidos "zalduendos" en Almería
El diestro Julián López "El Juli" salió este viernes a hombros en el tercer festejo de la Feria de la Virgen del Mar de Almería, un triunfo que se fraguó gracias a la raza y a la autoridad que impuso al toro menos malo de una muy deslucida corrida de Zalduendo, al que cortó las dos orejas.
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Antonio Ferrera, que entró a última hora en la feria sustituyendo al retirado Morante de la Puebla, exhibió un excelente manejo de capote en su primero, un toro de bonita lámina, con el que destacó poniendo banderillas, aunque sin poder sacar nada en claro en el último tercio, donde el toro llegó sin apenas fondo, con la cara natural y protestando los engaños.
Incierto y claudicante fue el cuarto, al que esta vez banderillearon los subalternos de la cuadrilla. Le costaba un mundo tirar para adelante, aunque por el izquierdo, muy a regañadientes también, se tragó algunas series de Ferrera, que volvió a mostrarse por encima de las circunstancias. Lo que no fue de recibo fue la orejita que cortó tras un pinchazo hondo.
No hubo acople por parte de Julián López "El Juli" con el blando y anovillado segundo, que llegó, incluso, a desarmarle en el recibo con el percal. La suerte de varas no pasó de simulacro, y así y todo se vino muy abajo el "zalduendo" en la muleta, imposibilitando el lucimiento del madrileño, que puso ganas pero sin sacar nada en claro de tan deslucido antagonista.
El quinto, al que tampoco se le hizo sangre ni para un análisis en el caballo, tuvo mejor son en la muleta que sus hermanos, lo que aprovechó el Juli para construir una actuación que fue de menos a más. Labor de raza y autoridad del madrileño, que resultó trompicado sin consecuencias cuando trataba de instrumentar un farol de rodillas.
Eso metió mucho más a la gente en el trasteo, lo que, sumado al gran volapié con el que finiquitó al astado, le pusieron en sus manos el doble trofeo.
El primero de Roca Rey, tercero de corrida, un toro terciado y con muy poca cara, manseó de salida antes de ser masacrado en el caballo. No fue a mejor en el último tercio, todo lo contrario, pues el animal embistió a oleadas, con genio y sin ritmo alguno.
Pero la gente tenía ganas de ver a Roca Rey, por eso, a la más mínima que hiciera el peruano, se entregaban con él de manera totalmente desmedida, de ahí el poco peso que tuvo la oreja que paseó tras una estocada muy baja.
Abanto y muy blando de salida fue el sexto, al que Roca Rey le dio una apretada tandas de chicuelinas abrochadas con larga cambiada de rodillas en la boca de riego.
También se quedó sin picar este toro, que fue quitado también por el peruano con el capote a la espalda. Faena con muchos tiempos muertos para dar aire al "zalduendo" que no podía ni con su esqueleto, y con el que Roca Rey quedó inédito.
Almería, viernes 25 de agosto de 2017. 3ª de Feria. Más de media plaza.
Toros de
, de pobre y muy desigual presentación, con casi 100 kilos de diferencia entre los 560 del primero y los 470 del segundo. Corrida de poco trapío y, aún peor, blanda y descastada, de juego muy deslucido. El menos malo, el quinto.
Antonio Ferrera, que sustituía a Morante de la Puebla, palmas tras aviso y oreja tras aviso.
Julián López "El Juli", ovación y dos orejas tras aviso.
Andrés Roca Rey, oreja y palmas.