El Turismo Taurino, en el Congreso Internacional de Calidad Turística

Expertos de todo el mundo debatieron los principales retos del sector turístico en la actualidad, así como las tendencias que marcarán el futuro en los próximos años. Organizado por el ICTE, Instituto para la Calidad Turística Española, entidad que gestiona en España la Marca Q, es el referente más importante de certificación de Calidad Turística a nivel mundial. En sus 17 años de vida, se ha convertido en un ejemplo de colaboración entre los sectores público y privado dentro del ámbito turístico y su éxito ha sido emulado en otros países.

El ICTE tiene como uno de sus principales objetivos la mejora de la competitividad de las empresas turísticas españolas, para lo que cuenta con el apoyo de las principales patronales turísticas de nuestro país, la Administración Central del Estado, las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos.

En esta edición de 2017 el Turismo Taurino tuvo una destacada participación a cargo de Miguel Ángel Moncholi que fue ponente en la mesa “Casos de éxito en la creación del producto”, donde se trataron aspecto como; ¿Qué hace a un destino diferente? o ¿Cómo posicionarse en un mercado altamente competitivo y repleto de atractivos turísticos de primer orden?, se abordaron varios casos de éxito así como la creación de marca.

Durante su intervención, Moncholi presentó la Unión Europea de Turismo Taurino. Asociación que apuesta por la promoción y difusión del mundo del toro, con el objeto de poner en valor toda la industria taurina desde sus distintas vertientes.

«La Unión Europea de Turismo Taurino nace para dar a conocer el Toro, mito y referencia que pervive gracias a las tauromaquias» destacó Moncholi, que también apunto como «el toro es el centro de 10 Tauromaquias en Europa y América. El turismo taurino permite conocerlo y amarlo»

Dentro de su ponencia, que tuvo una gran acogida entre los congresistas, destacó el papel del toro «como fuente de inspiración y centro de expresiones artísticas, museos, diseño, moda y cultura». Del mismo modo dejó claro el objetivo que persigue el turismo taurino «Conocer al toro y conocer su cría. Y la calidad turística es una herramienta imprescindible para hacerlo mejor». Líneas de trabajo bien definidas que delimitan un fin: «Conocer todas las tauromaquias, acercar al toro, un animal único que no puede desaparecer»

Todo ello dentro una nueva forma de turismo sostenible, que permite promover la explotación turística de las ganaderías, como centro de fomento cultural así como fuente de riqueza y empleo. Una oferta orientada a un cliente diverso que puede demandar un conocimiento sobre el mundo del toro de lidia y la tauromaquia.