La estafa viral de Wallapop que suplanta a la Guardia Civil y a un conocido banco
El miembro de Tabarnia, Jaume Vives, ha compartido en redes sociales el engaño que ha sufrido por un usuario que quería comprar su altavoz
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Uno de los fundadores de Tabarnia y periodista catalán, Jaume Vives, ha compartido a través de las redes sociales un intento de estafa por medio de la app Wallapop en la que han suplantado la identidad tanto de la Guardia Civil como de un conocido banco. Todo comenzaba cuando Vives compartía a través de la aplicación de compra y venta un altavoz que le habían “regalado por su cumpleaños”, que no quería preservar y que vendía a cambio de 300 euros.
A los 5 minutos, le responde un usuario: “Mi nombre es Maricela Germán, de Burgos. Estoy interesado en tu beoplay y estoy dispuesto a pagarte por transferencia bancaria. Dame tu número de whatsapp para contactarte”. En ese momento, ambos se intercambian teléfonos y hablan a través del chat. Eso sí, con ciertas dificultades en el lenguaje.
El periodista señala posteriormente que ha recibido un mensaje muy similar al primero que le había enviado la tal Maricela, solo que en esta ocasión era para enviar los altavoces a Nigeria, el mismo lugar al que posteriormente aseguraría Maricela que intentaba enviar también el paquete, “como regalo para su hijo”.
Todo se vuelve más surrealista en el momento en el que el usuario manda a Vives fotografías desde la sucursal bancaria en la que supuestamente ha realizado el envío de la transferencia bancaria al periodista para que envíe el altavoz. Maricela insiste mucho en que no quiere que el periodista “le decepcione”.
Es entonces cuando el intento de fraude se vuelve evidente: Vives recibe dos correos de confirmación del envío de 380 euros a través de transferencia bancaria. Lo peculiar es que la etiqueta oficial del banco Santander del correo estaba escrito en lo que parece una tipografía de WordArt de hace casi 20 años. Además, el correo electrónico incide en que está siendo “monitoreado por la Guardia Civil”, añadiendo además el logo.
Después de un vaivén de vaciles, Vives intenta llamar a Maricela, pero esta no le coge el teléfono. Finalmente le confiesa que está en la comisaría para poner la denuncia, y el usuario le responde con un escueto: “hijo de pu*ta”.