Reparten golosinas a los pasajeros de un avión para que no se quejen del llanto de su hijo
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los padres de Lorenza, una bebé de un año, pensaron que algo dulce sería una buena idea para tratar de hacer más llevadero el vuelo con destino Cancún que compartiría la familia al completo con los demás pasajeros, en caso de que su hija pudiera "molestar".
Así que, antes de embarcar, fueron uno a uno repartiendo una bolsa que contenía un par de tapones para los oídos, unas cuantas chucherías y una nota cuyo mensaje enterneció a una de las pasajeras del vuelo en cuestión hasta el punto de compartirla en Facebook junto a unas fotografías.
En la nota se puede leer: