La fiscalía investiga vertidos de Repsol en Cartagena tras la copiosa lluvia

La fiscalía superior de la comunidad de Murcia ha abierto de oficio unas diligencias de investigación para determinar si el vertido de petróleo desde la refinería de Repsol en el Valle de Escombreras (Cartagena) detectado el pasado sábado tras las abundantes lluvias caídas puede ser constitutivo de delito.

Fuentes de ese organismo han dicho a Efe que para el esclarecimiento de los hechos el fiscal de Medio Ambiente, Miguel de Mata, se dirigirá a los organismos competentes para recabar toda la información de la que dispongan, entre ellos, la Confederación Hidrográfica del Segura y el Gobierno autonómico.

Cuando se disponga de esa información y de la que pueda proporcionar la empresa, el ministerio público considerará si es necesario acordar la práctica de nuevas pruebas.

La empresa aseguró que, tras detectarse el vertido, activó el protocolo previsto para estos casos y se puso en marcha una serie de actividades para su control y la reducción de su incidencia.

16 camiones cuba de aspiración recogieron petróleo, y decenas de trabajadores procedieron a cercar la contaminación de la rambla del barranco del Charco, que va dar a la dársena de Escombreras del puerto de Cartagena, tras el desbordamiento en la noche del 20 al 21 de abril de la balsa de recogida de aguas pluviales de la refinería con arrastre de hidrocarburos aceitosos, según la empresa.

Desde la Asociación de Naturalistas del Sureste hablan del vertido de "miles de litros" de hidrocarburos y desde Ciudadanos sostienen que se originó en una balsa de pretratamiento de residuos y recuerdan que en septiembre de 2015 ocurrió algo similar, con lo que es un problema "estructural cuando se producen fuertes lluvias".

Los ecologistas coinciden con esa apreciación al señalar que "refleja un error en el diseño y/o funcionamiento de las nuevas instalaciones que no debería de permitir la llegada de derivados del petróleo a la rambla con lluvias importantes".

Lamentan que la empresa reste importancia al vertido, que según los conservacionistas se extendió por "cientos de metros" a lo largo del cauce, y piden que aporte datos reales y creíbles sobre el volumen de hidrocarburos vertidos a la rambla y retirados, así como de su lugar de destino.