No sabe que le ha tocado El Gordo y acaba en un juicio con su lotera por la Lotería de Navidad: ¿Pudo cobrarlo?

Cada 22 de diciembre, la emoción del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad recorre España. Con una participación masiva, millones de ciudadanos sueñan con la posibilidad de ser uno de los afortunados ganadores de El Gordo, el premio más grande del sorteo. 

Sin embargo, no siempre el camino hacia el premio es tan sencillo, y en ocasiones, la suerte puede traer consigo complicaciones inesperadas. Un caso singular ocurrió en 1981, cuando una mujer se vio envuelta en una increíble historia de despistes, juicios y malentendidos relacionados con el sorteo más famoso de España.

En aquella edición de la Lotería de Navidad, una mujer de 71 años, que se encontraba viendo la televisión, no tenía ni idea de que su vida había dado un giro radical. Durante el sorteo, el número premiado con "El Gordo" había sido el mismo que el que ella había comprado, pero la mujer no lo sabía. Lo que sucedió después fue una serie de confusiones que resultaron en un juicio entre la ganadora y su lotera.

Según la dueña de la administración de loterías, Felipa, la mujer se presentó a la administración a cobrar el premio sin mostrar la alegría que uno esperaría de un ganador de El Gordo. De hecho, su actitud fue tan indiferente que Felipa, basándose en esa reacción, pensó que el número de la señora no era el agraciado. Esto la llevó a suponer que la mujer había ganado solo la pedrea, un premio menor. Como resultado, le entregó 5.500 pesetas, una cantidad mucho más baja que los cuatro millones de pesetas correspondientes al primer premio.

No sabe que le ha tocado El Gordo

La situación dio un giro dramático cuando la mujer, tras ver en la televisión que su número había sido, efectivamente, el agraciado con "El Gordo", se dio cuenta de su error. Fue entonces cuando se dirigió a la comisaría de Policía, donde Felipa la reconoció como la ganadora del gran premio.

La lotera admitió el error y la entrega equivocada del dinero, pero la situación no terminó allí. A pesar de la rectificación, las dos mujeres se encontraron cara a cara en el juzgado, donde se tuvo que resolver el asunto de forma legal.

En el juicio, finalmente, se confirmó que la mujer era la legítima ganadora de "El Gordo" y, como tal, recibió su premio completo de cuatro millones de pesetas. Sin embargo, esta historia no solo es un relato sobre una confusión, sino también una lección sobre cómo un despiste puede convertirse en un complicado problema legal cuando está en juego una gran cantidad de dinero.

A pesar del error inicial, el desenlace fue positivo para la mujer, quien, tras la intervención judicial, recibió finalmente su premio completo.

¿Pudo cobrarlo?

Sin embargo, este caso pone de manifiesto que, aunque legalmente la ganadora tenía derecho al premio, el proceder de la lotera, al basarse en la actitud aparentemente indiferente de la mujer, desató un conflicto que estuvo a punto de convertirse en una tragedia para el ganador.

Por ley, la mujer tenía derecho a cobrar el premio desde el momento en que se efectuó el sorteo, ya que su décimo era legítimo y el número fue validado por el sistema oficial. El error estuvo en la interpretación errónea de la lotera, quien, debido a la actitud de la señora, pensó que no había ganado "El Gordo" y entregó un monto menor. En situaciones como esta, la intervención de las autoridades judiciales fue clave para resolver el conflicto.