Madrid - Publicado el - Actualizado
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Desde pequeños, cuando dibujamos el Sol lo pintamos de color amarillo. Y, si deseamos que sea más colorido, le agregamos unos rayos rojos y naranjas e incluso le ponemos unas gafas de sol para hacer la broma. Además, si lo que estamos ilustrando es un amanecer o atardecer, coloreamos el Sol con una tonalidad más anaranjada o colorada.
No obstante (y según cuenta BBC) nuestra estrella más próxima y centro del Sistema Solar no tiene un color amarillo, ni naranja, ni rojo. Es una mezcla de todos esos colores... ¡y mucho más!
El astro rey emite luz en un espectro continuo de colores y, si lo miras en un prisma, podrá observarse que la luz solar se divide en azul, verde, amarillo, naranja, rojo... Por tanto, esto se traduce en que el Sol cuenta con los mismos colores que un arcoíris que son (ni más ni menos) que luz solar que atraviesa gotas de agua en la atmósfera que actúan como pequeños prismas.
El motivo por el que lo vemos amarillo es el siguiente: cada color del espectro solar cuenta con una longitud de onda diferente. Estas ondas se van acortando del naranja, verde, azul, amarillo.. hasta alcanzar el violeta que es la onda más corta.
No obstante, cuando los rayos del Sol pasan por la atmósfera terrestre, algunas moléculas en el aire distorsionan los fotones de ondas más cortas, provocando que nos lleguen antes los de ondas más largas. Entonces, al predominar el amarillo en el espectro medio y absorber de un modo más fuerte los colores de la onda más corta, hace que el Sol lo veamos amarillo.
El debate entre expertos sobre el verdadero color del Sol es una realidad. Tanto es así que algunos apuntan a que el astro rey en realidad es de color verde. Durante los atardeceres, observamos como el cielo se tiñe de naranja y rojo. Se trata de una ilusión óptica creada por la interacción entre los rayos sociales y la atmósfera.
Ocurre que el Sol, en ese punto, se encuentra más próximo al horizonte y atraviesa un mayor número de moléculas atmosféricas. Diversas curiosidades que ponen sobre la mesa la inmensidad de saber que ocupa la astronomía de una estrella tan fundamental para la supervivencia de la raza humana.
¿Por qué el cielo es azul?
El cielo parece ser azul debido a la manera en que la atmósfera interactúa con los rayos del sol. La luz blanca, como la emitida por el sol, está compuesta por muchos colores diferentes de luz, cada uno con su propia longitud de onda correspondiente.
Según la NASA la luz del sol se ve blanca. Pero en realidad está compuesta de todos los colores del arcoíris. Hemos aprendido por la ciencia que la luz que vemos es una fracción de todos los tipos de energía electromagnética en el universo. Ondas de radio, microondas, infrarrojos, lux visible, luz ultravioleta, rayos x y rayos gamma son los tipos de energía que manda nuestra estrella a la tierra.
La luz visible es la misma que ven nuestros ojos. Con un prisma triangular la podemos descomponer en diferentes colores como se puede ver en la ventana mágica de la NASA.