Qué fue de... las riñoneras

El complemento de los 80 volvía con fuerza en 2019 y lo hacía con una clara vocación de ser un accesorio de moda ideal para quedarse mucho tiempo

Las riñoneras pueden tener su origen en las escarcelas, bolsa que llevaban en la cintura ya en la Edad Media

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Y en aquellos años 80 y principios de los 90 del siglo pasado, en sus momentos de máximo esplendor, la riñonera tenía tantos partidarios como detractores. Era amada y odiada a partes iguales.

Llevar encima una riñonera era lo más hortera del mundo. Ahora diríamos, en nuestro vocabulario de la segunda década del siglo XXI, lo más "antifashion" que podrías elegir porque no podemos olvidar que esta especie de bolso o cartera era, normalmente, de plástico o escay. Concebido más para uso masculino, se llevaba adosado a la cintura sobre el pantalón vaquero.

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Pues, ¡está de vuelta! Es más, en 2019 se convirtió en uno de los complementos ideales que toda influencer mostraba en sus redes en mil y una versiones. Aunque ahora no se la llama riñonera, así tal cual, sino se la denomina "bum bags", en inglés que siempre resulta más fino, más complemento de moda. Y si en los años 80 era un pequeño bolsito pensado más para los hombres, la actual riñonera no tiene ni sexo ni edad. Algunas de estas "bum bags", nuevas y modernas riñoneras, son ideales como la que muestra, la influencer a nivel mundial, Chiara Ferragni

Ver esta publicación en Instagram Sunny weather I’m ready for you ❤️ @intimissimiofficial #intimissimi #chiaralovesintimissimi #advertising Una publicación compartida de Chiara Ferragni ✨ (@chiaraferragni) el 10 Abr, 2019 a las 6:08 PDT

Pero si hay una precursora del renacimiento de la bum bags, vamos a llamarla riñonera -de ahora en adelante-, esa es Kim, Kim Kardashian

Ver esta publicación en Instagram Happy International Women’s Day Una publicación compartida de Kim Kardashian West (@kimkardashian) el 8 Mar, 2018 a las 5:04 PST

¿A qué se debe el nuevo boom de las riñoneras?

Una de las claves de ese éxito, es que para muchas de nosotras, la riñonera nos sirve en momentos muy específicos -como salir a andar, ir a hacer recados cerca de casa,...-, en los que apenas debemos llevar cosas: las llaves, un pequeño monedero, el tarjetero, el móvil y poco más. Sus dimensiones, menores que las de un bolso bandolera, por ejemplo, son suficientes para meter lo necesario y, por otra parte, son muy cómodas porque nos permiten tener las manos libres ya que la llevamos acoplada o a la cintura, cruzada por delante a la altura del pecho, o cruzada por la espalda o al hombro.

Podríamos, incluso, hablar de un todo un estilo a la hora de llevar la riñonera como hemos visto con las influencers.

Y quién lo iba a decir que aquel bolsito hortera se iba a convertir en tendencia, en un complemento totalmente de moda que han hecho suyo las grandes firmas como Furla , Chanel, Prada, Marc Jacobs, Chloé, Loewe, Hermes, Gucci o Louis Vuitton que le han dado una oportunidad de oro a esta forma de bolso.

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Tanto las grandes firmas de moda como otras low cost han reinventado la riñonera, las encontramos de todas las formas, la han convertido en un complemento versátil que nos sirve para ir al gimnasio con estilo como para ir de compras o salir de copas.

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La escarcela, ¿origen de la riñonera?

Para muchos estudiosos de la moda, el origen de este bolso, bolsa o monedero que llamamos riñonera -por llevarla cerca de los riñones en su origen- podríamos situarla en la Edad Media.

La escarcela es "una especie de bolsa que pendía de la cintura", define el diccionario de la RAE y también era una "parte de la armadura antigua que caía desde la cintura y cubría el muslo". Estas bolsas, las llevaban sobre todo los hombres, pero también las usaban las mujeres que las llevaban ocultas entre la ropa porque no tenían bolsillos.

La pintura, el arte, testigo de la historia nos muestra ejemplos de aquellas escarcelas, lo podemos observar en grandes obras que cuelgan de las paredes de nuestra pinacoteca universal, el Museo del Prado.

Los años, los siglos, fueron pasando y llegamos a los años 80 del siglo XX, cuando este bolsito adosado a la cintura permitía a los chicos llevar la cartera, llaves y las monedas. Ahora ha vuelto y puede que para quedarse.

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