Si vas a la playa, debes mirar esto en la previsión meteorológica
El sol o la temperatura no son las únicas variables que debes de valorar si no quieres llevarte ninguna sorpresa
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Disfrutar de un agradable día de playa depende no solo de del estado del cielo, también de muchas variables que deberíamos consultar antes de salir de casa. "En la playa estamos especialmente expuestos a las condiciones meteorológicas, tanto sobre la arena como cuando nos metemos en el mar", explica a cope.es Irene Santa, meteoróloga de eltiempo.es
La precipitación, la nubosidad, la radiación ultravioleta, la humedad, el viento, oleaje o temperatura del agua, son algunos indicadores que no deberíamos perder de vista.
El viento por ejemplo es un factor muy a tener en cuenta, ya que si sopla con fuerza puede hacer que la sensación térmica sea bastante inferior a la temperatura real. Además, si rola a lo largo del día puede modificar las condiciones y, por tanto pasar de un día soleado a uno nuboso o viceversa. También es uno de los factores que determina el tamaño de las olas, con lo que si las buscamos de una determinada manera no está de más mirar su previsión. Pero qué más debemos mirar ntes de un día de playa:
1. Valorar la previsión en conjunto y tener en cuenta todas las variables. La sensación térmica depende de la propia temperatura, el viento y la humedad, entre otros muchos. Es decir "no debemos quedarnos solo en si llueve o no y con el valor de la temperatura. Al final, es más importante la sensación térmica que la temperatura real. Si el cielo está más tapado y sopla el viento, nuestra sensación térmica será algo más baja, sentiremos que hace más fresco que si el viento está en calma y nos da el sol de lleno calentando nuestra piel", señala Irene Santa.
Por otro lado, en la costa, "la humedad siempre suele ser alta, lo que hace que la sensación térmica sea superior, con 32ºC y un 70% de humedad relativa, la sensación térmica sería de 41ºC".
2. Consultar el nivel de la radiación ultravioleta, sobre todo en verano, momento en el que suele ser más elevado. "El índice UV es una medida de la intensidad de radiación de tipo ultravioleta que llega del sol y depende de distintos factores: el día del año y la hora (llega más radiación en verano en las horas centrales del día), la latitud (por ejemplo Canarias tiene índices más altos normalmente que la península), la altitud (en montaña lleva más radiación que en la costa) o la nubosidad (las nubes bloquean parte de la radiación)".
Los índices ultravioletas muy altos o extremos indican que está llegando mucha radiación ultravioleta y que por tanto "tenemos que extremar las precauciones y protegernos de posibles daños en la piel".
3. Si vas a pasar todo el día en la playa, ten en cuenta los cambios que puede ir teniendo la situación con el paso de las horas, algo que sobre todo dependerá de si rola el viento. "Los cambios en la dirección del viento pueden hacer que cambie bastante el tiempo. Por ejemplo, por la tarde sopla más la brisa marina, si pasamos de viento terral (que sopla del interior a la costa) a viento de origen marítimo, bajará la sensación térmica y puede favorecer la aparición de nubes en el cielo".
4. Ten en cuenta que la brisa marina sopla sobre todo por las tardes, aunque, hacia el final del verano su fuerza comienza a disminuir.
5. El oleaje puede ser apropiado para practicar ciertos deportes, pero incómodo para navegar o para bañarse, incluso pudiendo resultar peligroso. Así que mirar esta variable puede resultar muy útil".
6. Si va a llover es importante fijarse también en las cantidades. "Si la cantidad es muy pequeña incluso podría llegar a no llover".
7. Un factor importante es el viento, "tanto la intensidad con la que sopla como la dirección".
8. Hay que tener en cuenta que el Cantábrico y el Atlántico tienen aguas más frías que el Mediterráneo.
9. Es importante conocer las condiciones marítimas tanto para bañarse como para navegar o practicar deportes náuticos.
10. Y sobre todo, revisar la previsión antes de salir de casa, ya que los pronósticos se actualizan constantemente y mejoran su precisión a corto plazo