El truco que recomienda la DGT si te pilla la nieve conduciendo tu coche sin cadenas y no puedes parar

Durante toda la semana el primer temporal de frío también provocará importantes nevadas en muchas zonas de España, por lo que si tienes que estar en la carretera, no las olvides

Coches en medio de una nevada

José Manuel Nieto

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Se viene una de las semanas más frías de todo el año, aunque estamos empezando 2024, y eso se está notando en la carretera desde este fin de semana. Son muchos los conductores que han tenido que enfrentarse, sin cadenas, a la operación retorno de la Navidad con nieve. Estos próximos días se prevé más, y la DGT se adelanta a estas situaciones.

Cuando cae la nieve sobre las carreteras, nunca falta ese conductor confiado que te adelanta a gran velocidad con el firme cubierto en blanco y prácticamente sin temor a que en la siguiente curva deslice. Su hazaña puede acabar con él sano y salvo en casa o accidentado en una cuneta. La DGT pide que extremes la precaución en estas situaciones.

Unas ruedas con cadenas

Un temporal de nieve, frío y hielo ha entrado en España. Es por lo que también llegan las carreteras en difíciles condiciones y el "o pones las cadenas o por aquí no pasas". Eso suele pasar en los puertos de montaña, pero no solo en los picos puede sorprenderte una nevada, por eso hay que estar siempre alerta.

Saber cómo afrontar este panorama es esencial para minimizar los riesgos. Para tener los menores problemas posibles, la DGT siempre recuerda una serie de consejos que debemos tener en cuenta. Unas recomendaciones que son esenciales para mejorar nuestra seguridad y facilitar a los servicios de emergencia su trabajo.

Si te pilla la nieve conduciendo

La nieve es fenómeno complejo que afecta a nuestra conducción. Con las primeras nevadas y la vista puesta en la temporada invernal, es una situación tan variable que cambia constantemente porque los cristales se desarrollan juntos en los puntos de contacto. Por eso se corre más riesgo.

Coches bajo una nevada

Al conducir con nieve fresca, el neumático está completamente cubierto de nieve. En nieve compacta, esta permanece en las ranuras de la banda de rodadura. Si la nieve ya está dura no habrá restos pegados a la banda de rodadura y como resultado el neumático se ve negro. No se puede manejar el vehículo de la misma manera en cada una de las situaciones.

Además, la DGT recuerda que, más allá de esas ruedas, frenos y suspensión también son elementos a revisar para garantizar el perfecto estado de mantenimiento del vehículo en cualquier época del año y especialmente en invierno, asociado a condiciones meteorológicas adversas como la nieve.

Es un hecho que un neumático de invierno funciona mejor en la nieve cuando todos sus bordes de agarre están a la vista. Si no hay nieve adherida, los bordes de agarre, que disponen de características especiales debido a su compuesto y estructura, facilitan el arranque y la parada.

El truco que recomienda la DGT

Si no queda más remedio que pasar por una de las zonas conflictivas, ten siempre el depósito del coche lo más lleno posible, compra unas cadenas y no dudes en echar un termo y una manta. Lo primero que tendremos que hacer es bajar nuestras expectativas y armarnos de paciencia.

Un coche sobre la nieve

Levantaremos el pie del acelerador y circularemos a punta de gas, a una velocidad lo suficientemente lenta como para que, de perder el control, no suframos un impacto fuerte. Del mismo modo, aumenta mucho la distancia de seguridad. Igual de importante es pisar el freno con muchísima suavidad. Pisarlo por completo nos hará perder adherencia y patinar.

Se recomienda circular con marchas largas para circular a velocidades bajas y limitar las aceleraciones. En cambio, si estamos bajando un puerto de montaña, lo ideal es circular con marchas cortas y utilizar el freno motor en la mayor parte de los casos para recurrir al uso del freno lo mínimo posible.

Además, no debemos olvidar pegar el vehículo lo máximo posible a la derecha, con el objetivo de liberar el máximo posible para que pasen otros vehículos mejor preparados y, sobre todo, los servicios de emergencias. Además, si tenemos que parar, no debemos tensar al máximo el freno de mano, pues se puede congelar y será más complicado de retirar.

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