Cosas de Radio Patio: Carta de una madre a los Reyes Magos

Esta semana, Cinta Molina nos trae la carta que escribe a sus majestades, los reyes de Oriente

ctv-2jd-queridos-reyes

Cinta Molina

Publicado el - Actualizado

3 min lectura

Queridos Reyes Magos:

No llego tarde ¿verdad? Hace muchos años que no recibís noticias y peticiones mías. Pero este año es diferente. Puede que haya una niña en mi casa que esté perdiendo la inocencia y no hace más que ponerme a prueba. Me ha obligado a escribir para dar credibilidad a su propia carta. Esta no es la misiva que he tenido que enseñar en mi casa, pero esta es completamente sincera.

He sido buena, en general, intento cumplir con mis obligaciones con alegría y devoción a los míos. Pero no me lo ponen nada fácil, así que hago esfuerzos de madre (magia y adivinación, según mi hijo) y solemos salir indemnes y contentos.

Normalmente suelo pediros alguna sorpresa que los niños incluyen en sus cartas, pero este año necesito que no acabe la magia. Algún truco, por favor, para que nos ilusionemos todos.Se me están acabando las ideas. Cuando eran pequeños todo era más fácil.

A Javier, de 8 años, casi le hemos tenido que sonsacar lo que quería, porque como los Reyes son Magos…no hacía falta escribirlo. Y como hemos visto tantos pajes reales y Reyes diferentes, ha llegado a la conclusión que hay muchos pajes disfrazados, nadie sabe quiénes son los auténticos reyes, juegan a despistar, “son como los espías de las pelis”. Bendita imaginación.

Alicia, con 11 años, no sabe ni lo que creer. Por un lado duda de lo que se cuenta en casa pero no quiere dar crédito al máximo de habladurías de corrillo en su patio y amistades. Total, me observa con recelo, sospecha de cualquier salida de casa no prevista de alguno de sus progenitores, y juega constantemente con su hermano al escondite por casa. Creo que lo hace para, según busca al pequeño, mirar escondrijos posibles para regalos.

Este año, creo que no me pillan, pero ando de puntillas y hago gestos constantes a amigos y familiares para mantener a salvo el secreto. Agotador todo.

Y quiero que me traigáis, por favor, urgente, un bote de energías, para no decaer. Y música para bailar y vitaminas para no enfermar, que no tengo tiempo de estar mala.

Realmente no quiero que se acabe la ilusión. Y los nervios. Porque entre los suyos, los míos los de si me falta algo y los de esconder, repartir, equilibrar sin pasarse e intentar sorprender. Añadiendo “os voy a despertar prontísimo porque no creo que sea capaz de dormir”, que aseguró el pequeño ayer ya… Bueno, los nervios que sean menos, por favor.

Queridos Reyes, llegais justo al final de un período navideño intenso y vacacional. Pero final, final. ¿No os habéis planteado llegar unos días antes? Ya sé que la tradición es así pero ahora entiendo a quién se decanta por Papá Noel.

Tranquilos, en mi casa eso no va a pasar. Adoro a Baltasar, sobre todo.

Voy a salir de mi escondite.

Os espero con un ojo abierto y el otro cerrado

Dejaré bombones por “esos momentos de capricho” y galletas (que tendré que comer o mordisquear.

Tranquilos, conmigo vuestro secreto está a salvo.

Con cariño y devoción

Cinta

PD: No os olvidéis de un tarro grande de paciencia, por favor, para cercanos y extraños.

Temas relacionados