Los ciclistas italianos piden perdón después del bochorno de la 13ª etapa del Giro

La 13ª etapa del Giro de Italia acabó con la victoria de Einer Rubio. El corredor colombiano del Movistar fue el más fuerte de la escapada en la subida final a Crans Montana y se llevó el triunfo en una jornada de alta montaña que no fue tal. Y es que el recorrido se recortó en algo más de 120 kilómetros por el mal tiempo y se disputaron solo 75 kilómetros con las correspondientes quejas de aficionados y patrocinadores.

Se había preguntado de forma anónima a los ciclistas y sus equipos se querían correr y 19 de 22 escuadras pidieron que se recortara la etapa. El Giro así lo hizo. El Gran San Bernardo se suprimió por completo y tras la salida neutralizada los corredores se montaron en los autobuses para viajar hasta Le Chable donde arrancó la etapa.

El problema fue que el mal tiempo prometido no apareció por ningún sitio y lo que se prometía una gran jornada de ciclismo acabó cercenada con el correspondiente perjuicio para el público. El enfado entre los aficionados es monumental, tanto es así que Cristian Salvado, presidente de la ACCPI, la asociación de ciclistas italianos, ha tenido que pedir perdón en la RAI.

"Hay que dejar constancia de que no hubo mal tiempo. Las aplicaciones de grupos deportivos más actualizadas daban mal tiempo y nos basamos en ellas. Hoy tenemos que pedir disculpas a la afición y a la organización. Todos sabemos que el tiempo en la montaña puede cambiar de repente, esta vez ha mejorado y la etapa se ha desarrollado en condiciones ideales", reconoció Salvato. "Por suerte esta vez cambió para mejor, pero también hubo ocasiones en las que la organización no había hecho nada y luego cambió para peor, como en el Gran Camiño este año también", continuó.

"Algo hay que hacer para desbloquear esta situación, la UCI debería dar la cara. No tenemos indicaciones claras de ellos, números claros de cuáles son los límites en cuanto a viento, humedad o temperatura, tanto de calor como de frío", finalizó.