Duras palabras de Trejo
El capitán del Rayo Vallecano explota ante la situación que vive el club: "Las cosas marchan peor"
"Duele la imagen como club que estamos dando. Son muchos los problemas y no vemos solución a nada. Este club necesita dar un paso adelante en todo sentido", escribió Trejo.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El Rayo Vallecano vive una temporada histórica que se está viendo empañada por todo lo que no tiene que ver con el devenir del primer equipo en el terreno de juego. Recién ascendido. El conjunto entrenado por Andoni Iraola marcha en una cómoda undécima posición con 31 puntos en 23 encuentros.
El equipo ha desplegado, en especial en su estadio, un fútbol espectacular que le ha llevado incluso a ocupar posiciones de Champions League durante varias jornadas y a clasificarse por segunda vez en su historia para las semifinales de la Copa del Rey. Sin embargo, los problemas extradeportivos están empañando una campaña para enmarcar.
El club está inmerso desde hace años en una grave crisis institucional. El divorcio entre el presidente Raúl Martín Presa y la grada de Vallecas es total y se ha maximizado después de la decisión de este de recuperar como entrenador del Rayo Vallecano femenino a Carlos Santiso, al que solo Presa perdona sus palabras en un grupo de Whatssap en las que promovía una agresión sexual grupal.
Este nuevo capítulo de la guerra entre afición y directiva es solo uno más de los que se vienen produciendo desde el principio de temporada en el Rayo por temas como los plazos para renovar los abonos, el estado de conservación del estadio o el trato hacía los equipos de cantera y la Fundación.
Todos estos episodios han sido suficientes para el capitán rayista, el argentino Óscar Trejo, que este domingo ha explotado en sus redes sociales: "Duele no la derrota de hoy, sino la imagen como club que estamos dando. Son muchos los problemas y lo más llamativo es que no vemos solución a nada en un año tan bueno y habiendo conseguido volver donde el club se merece, que es estar en Primera División. Las cosas marchan peor, femenino, cantera, nosotros mismos, la afición. Esperemos que no sea tarde para hacer autocrítica y 'querer mejorar' porque este club necesita ya dar un paso adelante en todo sentido", escribió Trejo.
Dura derrota ante Osasuna
La última derrota frente a Osasuna, unida a que una parte del fondo del estadio, donde se sientan Bukaneros, lució vacía, provocó que al término del encuentro varios aficionados se volvieran al palco para criticar al presidente, Raúl Martín Presa, que respondió encarándose.
Esa imagen es el reflejo de lo que se vive en Vallecas y del estallido social que hay alrededor de la figura del máximo dirigente, que parece cada vez más distanciado de la afición en todos los aspectos y en un callejón sin salida que ya salpica al equipo.
"Nos afecta mucho esta situación pero hay que mirar el césped y no coger el atajo fácil porque no es excusa, aunque es cierto que el ambiente afecta porque todo el mundo está pendiente de otras cosas. No sé cómo solucionarlo, solo sé que al equipo le perjudica y no puedo decir mucho más", dijo Andoni Iraola, entrenador del Rayo, al término del partido ante Osasuna.
Esa situación ya la advirtió también hace unos días el capitán del primer equipo, el argentino Óscar Trejo, justo antes de las semifinales de la Copa del Rey. "La situación no es la adecuada entre la afición y la directiva. La gente sabe que estamos a muerte con ellos y lo vamos a seguir estando porque lo que hacen es impresionante. Hay que intentar que se solucione pronto todo", señaló Trejo.
Esas declaraciones se produjeron el pasado 2 de febrero, tras ganar al Mallorca en cuartos de la Copa, en un partido en el que los aficionados del fondo entraron con el partido empezado, sin banderas, bufandas ni camisetas, todas requisadas, según el club, porque "no se puede llevar nada que contenga el símbolo, lema o alusión a Bukaneros".
Una semana después, para el histórico partido de ida de semifinales de la Copa del Rey, pareció que las aguas volvían a su cauce, pero fue un espejismo. Para ese día el presidente ofreció gratis las entradas para los abonados, toda la afición animó al unísono y el ambiente fue espectacular.
Contra Osasuna, solo 72 horas después, se reavivó la guerra. Hubo enormes colas para acceder al estadio en todas las localizaciones, lo que provocó el malestar de la afición, y en el fondo Bukaneros volvieron a ser cacheados con minuciosidad por la Policía Nacional. Al final, su decisión fue la de "abandonar el estadio porque no les dejaron otra opción", según dijeron en sus redes sociales.
La realidad es que el clima social es insostenible y ambas partes, afición y directiva, deben sentarse a dialogar y tratar de buscar una solución que no siga afectando al equipo y separando aún más al verdadero alma del club, su hinchada.