El 061 entrena a 4.000 jóvenes almerienses en reanimación en un nuevo Cardiomaratón

La parada cardíaca (PCR) es la principal causa de muerte prematura en España y en los países de nuestro entorno.

Redacción COPE Almería

Almería - Publicado el

6 min lectura

      
      
             
      

El Centro de Emergencias Sanitarias 061, perteneciente al Servicio Andaluz de Salud, y la Delegación Territorial de Salud y Consumo en Almería han organizado junto a la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo y Formación Profesional en Almería, y la colaboración del Ayuntamiento de Almería, un nuevo #cardiomaraton061 en el que se han formado a 4.000 jóvenes con motivo del Día Europeo de concienciación ante la Parada Cardíaca, que se conmemora desde el año 2013, el día 16 de octubre tras la designación del Parlamento Europeo de este día para la concienciación ante la parada cardiaca en toda la Unión Europea.

Los cardiomaratones 061 son unas jornadas de entrenamiento masivo en reanimación cardiaca, coordinadas por el Centro de Emergencias Sanitarias 061 en todas las provincias andaluzas, donde se forma en una mañana a más de 13.000 jóvenes. Esta es la décimotercera edición de estos denominados #cardiomaratones061 en Almería, que se iniciaron en la provincia en 2011 entrenando durante estos años a más de 41.000 personas.

Esta iniciativa ha contado en Almería con la presencia del delegado territorial de Salud y Consumo, Juan de la Cruz Belmonte, el delegado de Educación y Formación Profesional en Almería, Francisco Alonso, y el concejal de Ciudad Activa, Movilidad Urbana y Deporte, Antonio J. Casimiro, que han estado acompañados por la directora del Centro de Emergencias Sanitarias 061 en Almería, María Luz García y gerentes de centros hospitalarios y directores de distritos sanitarios de la provincia, así como representantes del ayuntamiento de Almería, de la diputación provincial, del grupo HLA Mediterráneo y del colegio de médicos de Almería.

En estas jornadas participan el Ayuntamiento de Almería y la fundación Mapfre junto a una veintena de instituciones públicas y privadas, que todos los años se suman a esta iniciativa en la provincia de Almería y que coordinados por el Centro de Emergencias Sanitarias 061, han entrenado en estos años a 41.356 alumnos de educación secundaria en reanimación cardiopulmonar.

El concejal Antonio J. Casimiro afirma que “ésta es la asignatura más importante del currículo educativo. Cualquier niño debe aprender a salvar una vida y por supuesto los técnicos deportivos. Tanto en mi labor como docente como ahora, siempre he insisto en que se aprenda a practicar la RCP. Por eso, además de los

centros escolares, están pasando por el Palacio de los Juegos Mediterráneos los clubes deportivos y técnicos y entrenadores, incluido los del Patronato Municipal de Deportes. Cualquier ser humano debe saber actuar ante lo más importante que hay como es salvar una vida”.

      
             
      

CARDIOMARATÓN061

Durante las sesiones formativas, en las que colaboran 120 docentes, los asistentes han puesto en práctica los consejos y recomendaciones de los profesionales sanitarios para realizar la reanimación cardiopulmonar sobre maniquíes o pacientes simulados, al tiempo que aprenderán la secuencia de actuaciones que determinan un aumento de la supervivencia tras sufrir una parada cardiorrespiratoria (PCR), lo que se ha llamado la ‘Cadena de Supervivencia’.

De la misma manera, y como explica Guillermo Plaza, entrenador del club de balonmano Bahía de Almería y colaborador del Cordiomaratón desde el año 2010, “además de las actuaciones con el alumnado, este año hemos ampliado el acceso a la formación los técnicos deportivos de los clubes, así como el propio personal del Patronato Municipal de Deportes”.

      
             
      

Las recomendaciones internacionales indican que una de las estrategias para disminuir la mortalidad de los pacientes que han sufrido una parada cardiorrespiratoria es enseñar a la población en general las medidas básicas que deben aplicar a estos pacientes mientras llegan los equipos sanitarios, y que han demostrado que aumentan la supervivencia en estos casos.

ATENCIÓN A PARADAS CARDIORESPIRATORIAS

La parada cardíaca (PCR) es la principal causa de muerte prematura en España y en los países de nuestro entorno. En la mayoría de los casos, su origen es cardíaco y se denomina muerte súbita cardíaca y puede afectar a personas jóvenes en una proporción importante. Se estima que la incidencia de la Parada cardíaca extrahospitalaria en Andalucía es de 19,5 por cada 100.000 habitantes y año, de las que más de la mitad, ocurren en el domicilio.

      

La parada cardíaca es considerada la emergencia sanitaria tiempo dependiente por excelencia, ya que el pronóstico del paciente y por tanto las probabilidades de supervivencia, van a depender del tiempo que transcurre desde que ocurre hasta que se inician las maniobras básicas de reanimación.

El Centro de Emergencias Sanitarias 061 atendió en 2023 a 1.129 pacientes con parada cardiorrespiratoria (PCR) con indicación de maniobras de reanimación y Soporte Vital Avanzado. La atención se inicia por parte de la tele operadora desde el inicio de la llamada en aquellas demandas en que se reconoce la situación de

PCR (96.4%) trasmitiendo al familiar o ciudadano que alerta las indicaciones (secuencia y modo de actuación) con el fin de mejorar las posibilidades de supervivencia del paciente.

El 30.91% de los pacientes que sufrieron una parada cardíaca y fueron atendidos por el 061 llegaron con pulso al hospital. La supervivencia al alta sin secuelas se alcanzó en el 11,27% de todos los pacientes asistidos.

Ante una situación de sospecha de parada cardiorrespiratoria, los gestores telefónicos de los centros coordinadores de urgencias y emergencias del 061 animan y explican a los alertantes como realizar estas maniobras básicas mientras que llegan los equipos de emergencias al lugar del suceso, dado que está demostrado que intentar aplicar estas técnicas a pesar de no tener conocimientos previos en primeros auxilios, ayuda a muchos pacientes llegando a aumentar las posibilidades de supervivencia en más del 50% de los afectados.

Estos eventos suceden en la calle, en el trabajo o mientras se hace ejercicio o una actividad extenuante, aunque ocurren en su mayoría en el hogar. En la actualidad, menos de 1 de cada 10 personas sobreviven. Las investigaciones realizadas muestran que la aplicación de las técnicas de reanimación cardiopulmonar por una persona que presencia la parada cardíaca aumenta la supervivencia entre 2 y 3 personas de cada 10, aunque sólo 1 de cada 5 pacientes llega a recibir esta ayuda.

En Andalucía, gracias al protocolo de atención telefónica ante una situación de sospecha de parada cardíaca, los testigos presenciales inician las maniobras básicas de reanimación cardiopulmonar mientras acuden los equipos de emergencias al lugar del suceso, siguiendo las instrucciones que se les facilitan desde la sala de coordinación de forma ininterrumpida hasta la llegada de los sanitarios. La RCP telefónica ayuda a personas que no tienen formación previa a ponerla en práctica en situaciones difíciles.

En caso de disponer de un desfibrilador (DEA) cerca, deberá de aplicarse a la mayor brevedad posible. El uso de un DEA en menos de 3 minutos y la aplicación durante este tiempo de las técnicas de reanimación básica, continuando con ellas de forma efectiva hasta la llegada del 061, hacen que las posibilidades de supervivencia se sitúen por encima del 50%. De ahí la importancia de la formación en RCP de los escolares, la implantación masiva y decidida de los DEA.

TÉCNICA DE REANIMACIÓN

La parada cardiorrespiratoria es la interrupción brusca, generalmente inesperada y potencialmente reversible de la respiración y de la circulación espontánea. Una recuperación del paciente sin secuelas neurológicas exige que los tiempos de

actuación sean mínimos. En este punto, la colaboración ciudadana, el aviso y el inicio inmediatos de maniobras de reanimación son imprescindibles para conseguir un buen resultado final.

La técnica de reanimación cardiopulmonar consiste en el mantenimiento de la vía aérea abierta, de la respiración y de la circulación de la sangre, sin equipo específico, sólo utilizando las manos y la boca, pudiéndose usar dispositivos de barrera para la vía aérea, evitando así el contacto directo con la víctima.