Henry Lee Lucas y Ottis Toole, El Rey Sádico y El Generalísimo del dolor

Hoy hablamos de dos asesinos que fueron pareja y que actuaron de forma conjunta en sus crímenes. Se trata de Henry Lee Lucas y Ottis Toole.

HENRY LEE

Henry Lee Lucas fue un hijo no deseado. Su madre que ejercia la prostitucion lo crió a base de palizas y siempre humillandolo. Es más se crió viendo como su madre apaleaba a su padre que era alcoholico y le faltaban las dos piernas. Muchas veces lo vistieron como una niña.

Era un adolescente cuando Lee Lucas tiene sus primeras experiencias sexuales que mantiene con animales y luego los mata. Tras la muerte de su padre, decide marcharse de casa, porque no queria vivir con su madre y se dedica a robar, por lo que es detenido y enviado a la cárcel. En la cárcel mantiene relaciones sexuales con hombres y cuando salió de allí, en 1960, con 24 años, en el transcurso de una violenta pelea con su madre, Henry preso de un ataque de ira le propina diversas puñaladas que acaban con su vida y viola el cadáver de su madre. Le detuvieron y le sentenciaron a prisión y cinco años de reclusión en un centro psiquiátrico.

En la prisión se le diagnosticó una psicopatía con desviaciones sexuales y sadismo. En 1970 y sin estar curado abandonó la cárcel y se marchó a vivir a casa de su hermana y su cuñado. Estos le creían curado. Henry Lee trató de no llamar demasiado la atención pero mató al perro de la familia.

OTTIS TOOLE

Luego aparece el otro asesino es escena, Ottis Toole. Sufría un ligero retraso mental, pero poseía una gran fortaleza física. Sufrió abusos siendo un niño. Su abuela era una mujer muy malvada y su hermana lo sometió a graves perversiones sexuales. Con siete años se vestía de niña. Siendo muy joven se hizo amante de su vecino. El fuego siempre le fascinó, tanto que se masturbaba despues de prender fuego a una casa. Antes de cumplir los diez años era adicto a las drogas y al alcohol.

Toole se enamoró de Henry Lee Lucas sin saber que ambos tenían la misma perversión necrófila y el asesinato. A Ottis le faltaba la inteligencia que tenía Henry Lee, y a éste le faltaba la fuerza bruta de Ottis. Ambos descuidaban su higiene pero lograban acercarse a las personas por su "simpatía".

Juntos se dedicaron a asesinar y descuartizar en una autopista, repartiendo luego los trozos por todo el país. Henry Lee Lucas violaba y asesinaba preferentemente mujeres usando un cuchillo, y Ottis se dedicaba a los hombres a los que disparaba. Ambos violaban a sus víctimas, después las asesinaban y descuartizaban.

A Ottis le cayó cadena perpetua y murió finalmente en la cárcel, y a Henry, pena de muerte. Esta fue rechazada finalmente en 1988 y Henry siguió vivo en prisión. El 13 de marzo de 2001, Henry murió en su celda tras un paro cardíaco. Se le cree responsable de ciento cincuenta y siete asesinatos, de los cuales ciento ocho los cometió en compañía de Ottis.