Vicente Moreno ya es historia en la UD Almería

Vicente Moreno ha dejado de ser entrenador de la UD Almeria. El preparador valenciano ya no ha dirigido el entrenamiento de este miércoles, una vez que el club rojiblanco le ha comunicado su despido (junto al de su cuerpo técnico) y se ha marchado de las instalaciones del Power Horse Stadium mientras, en ese momento, su hasta ahora plantilla se ejercitaba en el campo Anexo.

La humillante derrota en la tarde-noche del martes en el Ramón Sánchez Pizjuán, contra el Sevilla (5-1), ha sido la gota que ha colmado el vaso de una directiva que ha protagonizado la segunda mayor inversión en fichajes, en este mercado de verano, solamente por detrás del Real Madrid, pero que no se ha visto reflejada, por ahora, en resultados. Los que, tras siete jornadas, indican que los almerienses son el peor equipo de la Liga EA Sports, siendo el único que todavía no ha ganado ningún partido.

BUENAS SENSACIONES AL TRASTE

Eso sí, las buenas sensaciones en los partidos anteriores, estando en la parte alta de los equipos que más ocasiones generaba y que más remataba a puerta, hicieron que se mantuviera en el cargo. También producto de que algunos de los fichajes llegaron en el último tramo del mercado, con la competición ya iniciada. Pero todo se fue al traste con el indignante partido realizado contra un Sevilla que, hasta ayer, tenía solamente dos puntos más que la UDA y, por lo visto, más bien parecía que la diferencia entre ambos era sideral.

Ahora el club está en plena negociación para la llegada de su sustituto que debería estar ya en Almería en la jornada de mañana, con el fin de que tenga tres días para preparar la cita del domingo contra el Granada, partido que se antoja crucial para la recuperación almeriense y que no vea que la distancia con los demás equipos se amplía de manera considerable.

Nombres como los de Javi Gracia, Marcelino, Carlos Carvalhal o el propio Rubi, que estuvo en las dos campañas precedentes en el Almería, han sonado en las últimas horas. Aunque no se puede descartar nada en una directiva que suele sacarse algún entrenador con el que pocos o nadie cuenta.