Carnaval de Cádiz
El amor y las coplas de Juan Carlos Aragón
Escucha lo mejor de los pasodobles del autor gaditano dedicados a uno de los grandes temas del Carnaval de Cádiz
Cádiz - Publicado el - Actualizado
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El amor, sin duda uno de los temas más recurrentes de la poesía y del arte. Cualquier autor, pintor, compositor, escultor ha ofrecido parte de su obra a ese sentimiento tan íntimo y a la vez tan universal que está ligado desde los albores de la humanidad al propio arte. De hecho, cualquier disciplina artística basa parte de su desarrollo en representar el amor de una y mil maneras.
El Carnaval de Cádiz, como otra disciplina artística más, no escapa a esa exposición al amor. Muchos autores han cantado a sus parejas, al desamor, a las relaciones, a los sentimientos. Y uno de ellos es Juan Carlos Aragón.
Coplas de Los inmortales, La banda del Capitán Veneno, Los panteras. Comparsas y chirigotas, sin distinción. Juan Carlos Aragón le canta al amor de una manera única.
Pasodoble inédito de Los Mafiosos
Entre las grandes coplas de Aragón Becerra queda una copla dedicada a su mujer, Luisa Tejonero. Un pasodoble inédito de la comparsa Los Mafiosos que reza de esta manera.
Yo sé que en una noche de mayo,
si sigue borracha la luna
puede caer sobre el mundo azul un rayo
que nos deje el corazón temblando a oscuras.
Y puede llegar la locura,
la muerte u otro desmayo.
Puede caernos la flecha
de ese ángel que atraviesa
el corazón y te invade,
con el riesgo de que acabe
esa noche en una iglesia.
El invierno ya se nos despedía
y la primavera en flor se acercaba,
porque tras nuestras paredes oían
la canción desesperada.
Y allí, la guitarra y el mar
nos daban su luna de miel.
Y la golondrina del pueblo
cantaba en su vuelo al amanecer:
«Yo te traería un diamante, pero como soy tan pobre
solo con un pasodoble tengo que enamorarte»
Que es lo mismo que besarte y entre mis labios decirte
ese cariño imposible que solo puedo contarte.
Yo sabía que la luna, yo sabía que la luna,
borracha de madrugada
traería la fortuna, traería la fortuna
más desnuda y deseada.
No hay amor que huya cuando es su destino.
Y si la luna sirve de testigo
es el único motivo
porque el que el mundo entero puede esperar,
y por el que yo renuncio a mi libertad:
para vivir una vida contigo
En Tangos y Pasodobles, Germán Mansilla recopila lo mejor de Juan Carlos Aragón dedicado al amor. Pasodobles para el recuerdo que perdurarán por los tiempos del propio Carnaval.