Asidonia-Jerez

Cáritas Diocesana advierte que 'No tener casa mata'

La campaña de las Personas Sin Hogar propone un año más una reflexión sobre las realidades extremas entre los más desfavorecidos

Gabriel Álvarez

Jerez - Publicado el - Actualizado

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Cáritas Diocesana ostenta la voz de la campaña del Día de las Personas Sin Hogar en Asidonia-Jerez. Esta jornada, presentada a lo largo de esta semana, se celebra este domingo 25 de octubre y aporta parte del contenido de programa El Espejo de este viernes. A la espera de los testimonios más personales que llegarán en el mismo espacio de la próxima semana, ahora centra el mensaje las reflexiones de Silvia Pérez, coordinadora del Programa de Personas sn Hogar de Cáritas Diocesana.

Cuenta Asidonia-Jerez con el recurso del Centro de Día El Salvador que, en instalaciones de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl en el casco histórico jerezano, dirige Cáritas para beneficio de un grupo importante de personas que, de este modo, encuentran un espacio físico y el acompañamiento necesario en el proceso de recuperación e integración pretendido.

Su celebración, en pleno impacto social y sanitario de la pandemia este año, pone foco como siempre en la realidad de muchas personas sin hogar o de personas que viven en infraviviendas, lugares poco salubres y dignos para poder vivir con cierta seguridad y para quienes es una utopía poder adoptar las medidas de prevención decretadas por las Administraciones.

En este escenario de extrema vulnerabilidad de estas personas ante el virus, las entidades que impulsan la Campaña de Personas Sin Hogar — Cáritas, Faciam (Federación de Asociaciones y Centros de Ayuda a Marginados), XaPSLL (Xarxa d’Atenció a Persones Sense Llar de Barcelona) y besteBI (Plataforma por la Exclusión Residencial y a favor de las Personas Sin Hogar de Bilbao) — han elegido un mensaje de impacto para denunciar esta situación.

Con el contundente lema “NO TENER CASA MATA”, se quiere llamar la atención de los poderes públicos y de la ciudadanía sobre los efectos que la falta de una vivienda adecuada supone para miles de personas y familias en nuestro país, donde se estima que cerca de 800.000 hogares y 2,1 millones de personas sufren situaciones de inseguridad en la vivienda (VIII Informe Foessa sobre Exclusión y Desarrollo Social en España).

Cáritas conoce de primera mano estas situaciones de precariedad extrema gracias al trabajo de acogida y apoyo que se ofrece anualmente a las casi 40.000 las personas en situación de sin hogar acompañadas desde los proyectos desarrollados en todo el país por el conjunto de la Confederación. Este año se da un paso más en la reivindicación que las entidades promotoras de la jornada se viene impulsando en los últimos años para exigir que se garantice el derecho humano a la vivienda y apelar al conjunto de la sociedad a preguntarse cómo se sienten sin vivienda y sin protección las personas sin hogar.

Esas dificultades son especialmente graves en un país como España, que carece de un parque de vivienda social en alquiler adecuado: únicamente cuenta con cerca de 275.000 viviendas de ese tipo, lo que supone tan solo el 1,5 % del parque de viviendas principales (datos del Informe de la Defensoría del Pueblo “La vivienda protegida y el alquiler social en España 2019”). A ello se suma el hecho de que, según el estudio realizado en la “Estrategia Nacional Integral para Personas sin Hogar 2015-2020”, la esperanza de vida de las personas sin hogar está entre 42-52 años, lo que son unos 30 años menos que la población general.