Repoblación de pino y fauna cinegética: las pérdidas del incendio de Obejo y Cerro Muriano

Tres dias de duro trabajo del INFOCA han dado por estabilizado el incendio que ha afectado a una zona de sierra en Obejo y a un espacio de caída de proyectiles de la base militar de Cerro Muriano. Eso significa que no se seguirá propagando el fuego, pero aún no está controlado.

Según ha especificado a COPE el director del Centro Operativo de Los Villares en el INFOCA, Eduardo Nicolás, el plan contra incendios activado prevé dar por controlado el fuego en aproximadamente doce horas, aunque de momento no se ha conseguido controlar el perímetro al completo "porque es muy extenso". Las llamas, según el cálculo provisional, habrían afectado, sobre todo, a 571 hectáreas de terreno forestal - que no incluyen la zona de exclusión militar de Cerro Muriano-.

Fuentes del dispositivo desplegado han asegurado a COPE que el incendio se inició dentro de la base militar de Cerro Muriano y se expandió a la zona de caída de proyectiles. Esta zona, según fuentes del Ejército de Tierra, no tiene riesgo para las instalaciones, pero alli no está permitido el paso ni la incursión a través del espacio aéreo con aviones de extinción por su alta peligrosidad. La Unidad Militar de Emergencias y bomberos forestales han estado controlando el perímetro para evitar que las llamas se extendiesen a otras zonas mas delicadas fuera del campo de maniobras.

El incendio, según las mismas fuentes, se consiguió estabilizar el mismo viernes -día del inicio-, pero su entrada en la zona de exclusión provocó que se creara una carrera de fuego hacia la zona norte del terreno, afectando a varias fincas privadas y a una pública.

A lo largo de los tres días de trabajo, el INFOCA ha situado en la zona del incendio un puesto de mando con varios servicios informáticos, un director de extinción, un jefe de operación, una jefa de planificación a cargo de la unidad de medios y de logística, y más de 200 profesionales sobre el terreno. Hasta Córdoba se han desplazado bomberos de casi todo el territorio andaluz.

Pérdida de biodiversidad

De las más de 1.800 héctareas quemadas en su conjunto, hay que lamentar la pérdida de pino y fauna cinegética. "Esta zona de Sierra Morena se caracteriza por tener este tipo de fauna, que es el principal ingreso de las fincas privadas; y replobaciones de pino y monte mediterráneo", explica Eduardo Nicolás. Por lo demás, "no creo que haya que lamentar la pérdida de otras especies silvestres o salvajes tipo avifauna o lince ibérico, porque el campeo de estas especies es muy grande y la superficie afectada es bastante pequeña para su campeo".