Alivio momentáneo por la vuelta del agua a Las Jaras
Los 300 vecinos de las urbanizaciones de esa zona de Córdoba esperan que se solucione el problema de abastecimiento de una vez por todas a través del Ayuntamiento
Córdoba - Publicado el - Actualizado
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Los vecinos de Las Jaras pagan IBI como el resto de cordobeses y residen en urbanizaciones perfectamente legales en terrenos urbanizables. Sin embargo, desde hace demasiado tiempo sufren periódicos problemas de abastecimiento de agua. Cortes que, especialmente cuando el calor aprieta, convierten el día a día en un entorno tan pintoresco y natural en un sinvivir. En Las Jaras incluso han llegado a debatir sobre la calidad del agua que llega a sus grifos.
El pasado domingo a las once de la mañana el agua dejó de correr por Las Jaras. La empresa suministradora, Luxico, les dio entonces dos razones. En un primer momento, que el depósito del que ser abastecen se había quedado sin agua y, luego, que se había producido una avería en una tubería. En todo caso, les prometió, tras tres días sin suministro, que volvería. Los vecinos decidieron tras reunirse presentar varias denuncias contra su situación.
Ayer miércoles el Ayuntamiento, a través de la Gerencia Municipal de Urbanismo y de la empresa municipal Emacsa, junto con los efectivos de la Brigada Guzmán el Bueno X, desplazaron un camión cisterna hasta la urbanización para solucionar momentáneamente la situación. Cabe recordar que el pasado 3 de marzo desde la Gerencia Municipal de Urbanismo se requirió a la empresa encargada de la gestión y suministro de agua en Las Jaras el permiso de vertidos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), así como la necesidad de solicitar a la Gerencia la licencia de reforma integral de conducciones de abastecimiento y saneamiento en Las Jaras. Este requerimiento tuvo que ser suspendido por la declaración del Estado de Alarma y vuelve a entrar en vigor el próximo 1 de junio. En caso de no ser atendido por la empresa propietaria puede desembocar en un expediente de declaración de incumplimiento por parte de la GMU, con el fin de que el Ayuntamiento, se haga cargo de la reparación integral y posterior gestión directa o indirecta del abastecimiento.
Normalidad con "una borrasca encima grandísima"
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Por fin este jueves, en torno a las siete se les empezó a dar agua de manera escalonada en Las Jaras. Juan Estévez, secretario del Consejo de Distrito de la Sierra y miembro de la Asociación de Vecinos de Las Jaras, confirma que el agua ha regresado a esta zona de Córdoba: “un poco antes de las siete de la mañana se nos empezó a dar agua de forma un poco escalonada, un poco tímida, pero efectivamente durante la mañana se ha ido recuperando y puede haber algún tipo de pequeñas anomalías como han detectado algunos vecinos, pero muy poco más”.
Eso sí, advierte Estévez que la normalidad que se respira puede ser, por desgracia, flor de un día: “esta normalidad tiene encima una borrasca grandísima. Si esto el Ayuntamiento no tiene capacidad ni quiere resolverlo dentro de muy pocos días estaremos en la misma situación que estamos ahora mismo”.
El inveterado conflicto que tienen en Las Jaras con el agua requiere una solución urgente. Estévez señala directamente al Ayuntamiento para que les dé una solución definitiva: “esto es un problema que viene ya de hace mucho tiempo con este equipo de gobierno y con anteriores. El Ayuntamiento tendrá que tomar las medidas necesarias para que el agua sea abastecida a través del ayuntamiento en la modalidad que quiera, con empresa pública, con empresa privada… como quiera, pero es el Ayuntamiento el único responsable y el único que tiene capacidad para resolver este problema”.
Los primeros cortes en Las Jaras llegaron hace más de tres años y a finales de enero de 2019 el grupo municipal de Ciudadanos logró que todos los grupos municipales del Pleno apoyaran su moción sobre el problema del suministro de agua potable en las Jaras. En esa moción se instaba al Ayuntamiento de Córdoba a que garantizara el suministro de agua potable en esta urbanización, exigiendo que el suministro, tratamiento y vertido de agua se lleve a cabo por una empresa que cumpla con todos los requisitos legales y exigidos por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Casi año y medio más tarde unas 300 familias que viven en esa urbanización esperan que las fútiles promesas de los políticos y las trabas de la burocracia dejen paso a una realidad pura y cristalina como ha de ser el agua de la que desean disfrutar en sus viviendas.
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