La Junta de Andalucía atiende en la primera mitad de 2024 casi el mismo número de menores víctimas de violencia de género que en todo el año 2023
40 casos atendidos por la Junta en 2024, 36 solo en la primera mitad de 2023 I La Junta trabaja para evitar la doble victimización de las víctimas durante el proceso judicial
Córdoba - Publicado el - Actualizado
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40 victimas menores de violencia de género han sido atendidas en Córdoba por la Junta de Andalucía en 2023. Solo en la primera mitad de 2024, habían sido ya 36 las víctimas atendidas. Son datos que ha ofrecido la institución regional a COPE y que certifican un problema del que se viene advirtiendo desde hace tiempo: las agresiones sexuales y la violencia de género entre los menores de edad no dejan de aumentar. Según los datos ofrecidos por la Fiscalía de Menores en Córdoba para el año 2023, los delitos contra la libertad sexual y de violencia de género son los que más aumentan entre las infracciones de los menores. Especialmente, en la franja entre los 16 y los 18 años.
Lucena, donde precisamente se está investigando una agresión sexual a una menor durante este fin de semana, ha sido el lugar elegido por la Junta para formar a sus abogados de oficio en esta materia. Con los números sobre la mesa, la Junta avanza en su atención a víctimas menores. Sobre todo, para que el proceso judicial no las victimice doblemente.
Esteban Rondón, director general de Justicia Juvenil y Cooperación de la institución regional, ha explicado a esta cadena que los equipos del SAVA, con psicólogos, realizan informes de vulnerabilidad de las víctimas menores para, durante el proceso judicial, la institución pueda realizar un acompañamiento adecuado. La declaración que la mejor lleva a cabo ante el juez, además, se realiza en una sala apartada, la denominada sala Gesell, con el objetivo de que ignore en la medida de lo posible la envergadura de su declaración.
Uno de los grandes motivos para que estas cifras estén aumentando, según los estudios de la Junta, son las redes sociales. "Nuestros menores no son conscientes de la trascendencia que tiene el envío de una imagen inapropiada, entre otras actuaciones", explica Rondón. La educación y las campañas de prevención son el remedio