IGLESIA
La Iglesia de Granada y los sindicatos comparten preocupación por la precariedad laboral
Reunión del arzobispo Mons. Gil Tamayo con los responsables sindicales provinciales de UGT y Comisiones Oberas
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Granada - Publicado el - Actualizado
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El arzobispo de Granada, acompañado de miembros del Secretariado de Pastoral Obrera y del Trabajo de la diócesis, se reúne con los secretarios generales de CCOO y UGT, para abordar la situación y los desafíos de la economía, del trabajo y de las condiciones laborales en la provincia
La reunión se ha realizado este lunes en la sede del arzobispado de Granada y han participado su titular, el arzobispo José María Gil Tamayo; los secretarios provinciales de CCOO y UGT, Daniel Mesa y Luís Miguel Gutiérrez, respectivamente; y los miembros del Secretariado de Pastoral Obrera y del Trabajo de la diócesis, Antonio Manuel Montosa, José María García Gálvez y Gonzalo Ruiz.
El encuentro, desarrollado en un tono cordial y cercano, ha permitido compartir el diagnóstico “de la situación social y económica de la provincia de Granada. Las fortalezas y debilidades de la economía local, la lacra del paro, la siniestralidad laboral, la falta de oportunidades para los jóvenes, que después de un largo proceso de formación, no encuentran empleo y se ven obligados a emigrar”, según ha señalado Gonzalo Ruiz, director de esta pastoral de la Iglesia diocesana.
PREOCUPACIÓN POR LA PRECARIEDAD LABORAL
Gil Tamayo ha mostrado especial interés en conocer de mano de las organizaciones de trabajadoras y de trabajadores la situación sociolaboral y darle recorrido a este tipo de reuniones. En este sentido, todas las partes se han emplazado a continuar estos contacto para abordar “aspectos concretos, en los que sean posible la colaboración mutua”, según indica el responsable de Pastoral del Trabajo diocesano.
Uno de los temas centrales de la reunión ha sido el diálogo mantenido sobre “el proceso migratorio”. Una situación que se concreta en la provincia con una gran cantidad de trabajadoras y trabajadoras en el trabajo agrario, en el servicio doméstico y en la atención y cuidado de las personas mayores y discapacitadas. Un colectivo en el “preocupa sobre todo, la precariedad laboral, la ausencia de contratos y la dificultad para organizarse, reivindicar un salario justo y unas condiciones laborales dignas”, subraya Ruiz.