Le ocupan la casa mientras está de fin de semana
Uno de los ocupas incluso atacó con una espada al inquilino de la vivienda
Granada - Publicado el - Actualizado
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Todo ocurrió sobre las 21,15 horas de este pasado domingo una de sus unidades fue requerida por una señora que manifestaba que en su domicilio había una riña.
Cuando los agentes llegaron a la vivienda, observaron a un individuo que supuestamente "portaba una espada" y estaba "agrediendo a otras dos personas", mientras éstas intentaban "defenderse del ataque".
Forcejeo entre Policía y ocupas
En esos momentos, uno de los agentes golpeó en el brazo al agresor logrando que soltase la espada, tras lo cual habría intentado huir y sacado "una navaja del bolsillo del pantalón, y tras infligirse varios cortes en los brazos", amenazado al policía que, "a pesar de la gran resistencia del atacante", logró reducirlo.
Una de las dos personas que estaban siendo agredidas por el sujeto era el morador de la vivienda, que manifestó, según ha informado la Policía Local, que había pasado el día fuera y, al llegar a su casa, se había encontrado "el candado de la cancela de acceso fracturado y el cristal de la puerta principal con el cristal roto".
Dentro se encontraban tres personas, con las que se inició una discusión, en el transcurso de la cual el detenido sacó una navaja con la que le habría intimidado para, posteriormente, coger "una espada decorativa que se encontraba en la propia vivienda y con varios aperos de labranza".
Habían metido todas sus pertenencias dentro de la vivienda
Las tres personas que accedieron al domicilio tras romper las cerraduras tenían sus pertenencias personales en el interior y, al parecer, la intención de permanecer en el mismo. Una vez realizada la inspección de las dependencias, los policías encontraron la decoración revuelta y varios objetos rotos.
Uno de los vecinos corroboró que efectivamente el acceso no autorizado a la vivienda se había producido ese mismo día.
Por ello, se procedió a la detención y traslado a dependencias policiales de las tres personas que se encontraban ilegítimamente en el interior de la vivienda.
El agente actuante, a pesar de sufrir lesiones al proceder a la detención del agresor, no precisó asistencia sanitaria en un primer momento.