Paso a paso en el caso Juana Rivas: Un menor entre la justicia italiana y española
Repasamos todo el recorrido judicial de la madre granadina y sus hijos
Juana Rivas
Granada - Publicado el
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La relación de Juana Rivas y su expareja, Francesco Arcuri, a quien la justicia italiana ha vuelto a otorgar la custodia del hijo menor de ambos, sigue sumando episodios a un recorrido judicial que comenzó hace 16 años con un primer fallo del Penal 1 de Granada, en 2009, que lo condenó a él por lesiones en el ámbito familiar.
Esa primera sentencia se convirtió en el cimiento de una causa por violencia machista:
De Italia a Maracena
Rivas y Arcuri volvieron a ser pareja, fijaron su residencia en Italia y tuvieron a su segundo hijo, Daniel, que ahora tiene 11 años. A finales de 2016, ella regresó a Maracena (Granada), según su relato huyendo de un día a día de maltrato.
Con una abogada de oficio presentó las primeras denuncias, que fueron archivadas, y comenzó un periplo judicial que interrumpió con la desaparición junto a sus hijos para no cumplir la orden de entregarlos a su padre.
Ya en el verano de 2017, cuando Juana Rivas tenía 35 años y sus hijos 2 y 10, esta vecina de Maracena superó las 150.000 firmas de apoyo para evitar que los niños volvieran a Italia con el padre. A su lucha se sumaron de manera explícita políticos como la entonces presidenta de Andalucía, Susana Díaz.
Recursos, desaparición y arresto
Aunque los representantes jurídicos de Juana Rivas trazaron una estrategia de recursos contra la sentencia que ordenaba a esta vecina a "reintegrar" a los menores con su padre a Italia - su lugar de residencia-, ni el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ni la justicia europea frenaron esa orden.
El 26 de julio de 2017, Juana Rivas incumplió el plazo máximo para entregar a los hijos a su padre y desapareció con ellos, lo que activó una citación judicial y un movimiento social de apoyo que colgó en balcones y ventanas mensajes de 'Juana está en mi casa'.
El Juzgado de Instrucción 2 de Granada asumió entonces la vía penal del caso y citó a Rivas y a su expareja a comparecer el 8 de agosto, aunque ella no acudió al juzgado, que dictó una orden de búsqueda y detención.
Aún en paradero desconocido, el 15 de agosto de aquel 2017 Rivas remitió una carta en la que negó tener raptados a sus hijos y en la que narró la "pesadilla de terror" que enfrentaba.
Juana Rivas fue detenida el 22 de agosto de 2017, cuando se presentó en los juzgados de Granada, aunque sin sus hijos, y quedó entonces en libertad provisional. Días después, el 28 de agosto y horas antes de que se cumpliera el plazo judicial para dejar a los menores en el punto de encuentro, los llevó a dependencias de la Guardia Civil.
Los dos niños se reencontraron entonces con su padre, Francesco Arcuri, y regresaron con él a Italia mientras avanzaban las causas sociales y penales en los dos países.
La condena y el indulto
El titular del Penal 1 de Granada, Manuel Piñar, condenó en julio de 2018 a Juana Rivas a cinco años de prisión y a seis de privación de la patria potestad por dos delitos de sustracción de menores, una pena ratificada un año después por la Audiencia de Granada.
En mayo 2019, un nuevo recurso llevó el fallo al Tribunal Supremo, que rebajó a la mitad la pena, al entender que solo había un delito. Piñar solicitó la ejecución de la sentencia y Rivas entró en prisión en junio de 2021.
Su letrado solicitó su indulto, que el Consejo de Ministros le concedió de manera parcial el 16 de noviembre de 2021. Esa medida de gracia no cambió que la custodia de los dos hijos la tuviera su padre, una medida recurrida.
El Tribunal Supremo de Italia ordenó, en abril de 2024, repetir el juicio civil sobre la custodia de los hijos de Rivas y Arcuri (uno ya mayor de edad), que se ha resuelto ahora con la decisión de volver a otorgar la custodia del menor al padre.
En este contexto, el equipo jurídico de Rivas, Aránguez Abogados, difundió en diciembre de 2024 un vídeo del mayor de los dos hijos de la expareja, que vive con su madre, y que dijo que su hermano estaba en peligro por vivir con su padre. Ese mismo diciembre, el día 22, el menor viajó a España con un permiso especial para ver a la familia materna.
Más denuncias y una medida cautelar
El equipo jurídico de Juana Rivas activó en diciembre una estrategia judicial con nuevas denuncias por maltrato que han sido archivadas ya en 2025 y con las que pedía medidas cautelares para evitar que el menor regresase a Italia.
Aunque el niño debió volver el 2 de enero, no ha salido de España. El Juzgado de Instrucción 4 de Granada, en funciones de guardia, paralizó el 7 de enero de manera provisional ese viaje, una medida que sigue vigente. Desde entonces, el menor permanece con la madre, escolarizado en Maracena, donde ha celebrado su 11 cumpleaños.