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Imágenes para el recuerdo en Motril: Trofeo Ciudad de Motril y partido con el Rayo Vallecano (año 1998)

Imágenes para el recuerdo en Motril Trofeo Ciudad de Motril y partido con el Rayo Vallecano (año 1998)

José A. Salvador

Motril - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Como era de prever por su condición de novato, el Motril CF sufrió lo indecible para lograr la permanencia en su primera temporada en la Segunda División B. Mantenerse en el potente grupo IV de entonces había sido casi una gesta y, de cara a la siguiente campaña, ya con más conocimiento del medio, la directiva, presidida por Manuel Pérez Ortega, quiso evitar sobresaltos y apostó por dar un salto de calidad y experiencia a la plantilla.

Imágenes para el recuerdo en Motril Trofeo Ciudad de Motril y partido con el Rayo Vallecano (año 1998)

Con fichajes de cierto caché para la categoría, se hizo un stage de preparación en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sierra Nevada y se concertaron varios partidos en el estadio municipal Escribano Castilla ante equipos de entidad. El primero de los amistosos en ese verano de 1998 fue contra un conjunto que esa temporada se iba a estrenar en Primera División, el Extremadura, y se saldó con empate a uno. Después, tras el Trofeo Diputación, que enfrentó a los blanquiazules con el Granada (1-2); el equipo motrileño se adjudicaría el Trofeo Ciudad de Motril al vencer por 1-0 a un Segunda División, el Albacete. A la entrega del Trofeo a Martínez, por parte del alcalde de la ciudad Luis Rubiales, corresponde una de las fotos de este artículo.

La segunda se produjo en el último de los partidos antes de empezar la liga, disputado contra el Rayo Vallecano en contraprestación por el fichaje de Carlos Rivera que, tras jugar las dos anteriores temporadas con el Motril CF, había recalado en el club rayista. El encuentro finalizó con empate a uno y antes del mismo el presidente Manuel Pérez Ortega entregó una placa de reconocimiento al joven futbolista cordobés, es otra de las imágenes que ilustra esta sección. Rivera jugaría poco esa temporada con el Rayo, aunque puso su granito de arena en el ascenso de su nuevo equipo a Primera División.