Van a una discoteca de Granada y le hacen una petición especial a la taxista: "Me dejaron buena propina"

Si hay una profesión en la que los trabajadores viven historias surrealistas, esos son los conductores profesionales, sobre todo, cuando operan por la noche a altas horas

TikTok: @ellataxista

La taxista y el lugar donde ocurre

José Manuel Nieto

Publicado el

3 min lectura

      
      
             
      

El sector del taxi en España es fuerte, pese a que la profesión de taxista es una de las más complicadas que se te pueden ocurrir. A 1 de mayo de 2024, son 61.513 licencias repartidas a lo largo del país. En Granada, hay una de ellas que pertenece a esta profesional que confiesa la petición especial que le hicieron al ir a una discoteca.

En los próximos años será necesario un relevo generacional de conductores debido a que la edad media es superior a los 45 años. Aunque la demanda de taxistas es desigual en el conjunto del territorio español, dado que, sobre todo, las grandes ciudades y los destinos turísticos son las zonas en las que hay más trabajo.

Una de las razones para convertirse en taxista es la flexibilidad horaria y la manera independiente de trabajo que te permite este oficio. Esto se contrapone con las horas al frente de un vehículo, el riesgo que ello supone jugándote la vida en algunas ocasiones, así como el simple hecho de trabajar de cara al público con personas que no siempre son educadas.

Un taxi en una ciudad

Los precios para poder obtener las licencias y llevar un taxi varían en función de la ciudad o territorio en el que la solicitemos. En la lista de las ciudades más caras para adquirir una licencia son Madrid y Barcelona, en el caso de la capital ronda los 130.000 euros. Por el contrario, en Zaragoza es mucho menor, costando unos 15.000.

La taxista

Un taxista es una persona que se dedica a conducir de manera profesional y llevar a pasajeros de un sitio a otro. Ese transporte conlleva un precio, que dependerá de la distancia a la que se encuentre el destino. Los taxistas pueden trabajar para sí mismos, siendo dueños de una licencia, o trabajar para otros, que los contratan para llevar sus taxis.

Tal y como recoge la ‘Guía Práctica de Riesgos y Medidas Preventivas para Autónomos en el Sector del Taxi’, realizada por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), ser taxista requiere de un permanente estado de concentración y tensión debido a la conducción.

      
             
      

Además, debemos tener en cuenta que se trata de un trabajo en solitario, lo que puede provocar en muchas ocasiones efectos psicológicos y sociales que suelen traducirse en estrés. Por otro lado, hablamos de un trabajo sedentario donde el vehículo es el lugar y puesto de trabajo, lo que puede provocar malestar físico.

Un taxi a la salida de un recinto público

También debemos tener en cuenta la jornada de trabajo, variable y normalmente de más de 8 horas diarias. No hay tiempos de descanso estipulados. Normalmente se realizan cuando el servicio lo permite y no cuando el cuerpo lo requiere. La carga mental de fatiga mental y las alteraciones del ciclo circadiano al realizar un trabajo nocturno son tremendas.

Le hacen una petición especial

Podrías pensar que lo único que se necesita para ser taxista es saber conducir. Sin embargo, para dedicarte a esta profesión de manera profesional y cumplir con las expectativas de los clientes, debes contar con ciertas habilidades. Entre ellas está tener esta mano izquierda con los usuarios como demuestra la profesional del vídeo.

      
             
      

Saber tratar con los clientes, independientemente de quiénes sean y si te agradan más o menos, es esencial. Contar con capacidad de escucha activa, como demuestra la taxista de Granada cuando lleva a unos jóvenes a la discoteca, también provoca situaciones tan peculiares como la de esta historia.