"El último que apague la luz"

por Pedro Rodríguez

Rodri

Pedro Rodríguez González

Publicado el - Actualizado

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Tengo junto a mi, en la mesa, un libro de Lluis Bassets, titulado “El último que apague la Luz”. Con el argumento de que el periodico impreso va a desaparecer, entes de lo que creíamos...

La prensa de papel ha sido durante una larga época la imagen del mundo y su conciencia. Pero los medios cambian porque los ciudadanos, que los consumen y usan, quieren que cambien.

En este momento, los lectores están siendo protagonistas del salto del papel a la nueva era digital. Este cambio lo relaciono con la noticia del cierre de cientos de quioscos de prensa por toda España.

En A3 TV, el jueves pasado, entrevistaban, a un damnificado y le echaba la culpa a la pandemia, con toda razón.

Pero, también la tiene el cambio de costumbre del lector que está pasando del papel al digital, de forma imparable.

Si lo piensamos bien: ¿Qué “semiconfinado”, va a salir a la calle para comprar un periódico, pudiendo leerlo en el digital...?.

“NOSTALGIA DEL “ODIEL”

No se si recuerdas que, cuando se declaró la pandemia, el gobierno consideró el negocio de los quioscos un servicio esencial. Sin embargo, la “segunda ola” no han podido superarla.

A esta ruina le debemos sumar otra mucha mayor, la de los diarios de gran tirada nacional, que sufren una doble crisis de venta (30%) y de ingresos publicitarios (50% menos).

Al terminar el BD me domina la melancolía de los años 60, con los recuerdos de aquellas linotipias en las naves del diario ODIEL donde un grupo de profesionales (Gallardo, Segovia, Marquez, Arazola, Octavio, Rodri, Flery, Rebollo, Enrique Seijas...) confeccionaban el periódico, cada noche, a base de coraje, cariño y capacidad.

Las crisis de la pandemia, y la nueva era digital, obligan a la prensa, pues, a buscar nuevos modelos de negocios.

Los cambios tecnológicos están desalojando al periodismo y a los periódicos, tal como lo hemos conocido, del centro de la plaza del consumo.

El periodismo y la información del futuro va a circular exclusivamente por el ciberespacio.

Pronto habrá que decir adiós a la vieja nave de papel. Y a alguien le tocará decir: “El último que apague la luz”. ¡BUENOS DÍAS!