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Un titular sobre lo vivido ayer, en España, podrían ser “ ocho millones de menores de edad toman la calle”.
Esto es el hecho objetivo. Pero si pensamos en el subjetivo, es decir, el estado de ánimo de la mayoría lo podríamos titular: “Entre el miedo y la libertad”.
Los niños y niñas, acompañados por padres o madres, tomaron ayer la calle con la ilusión de un día de reyes.
El mayo francés (año 68) nos dejó frases y eslóganes representativos de una juventud rebelde: “Lo bello no es la libertad, sino liberarse”, “¡Prohibido prohibir!, entre otros.
De los niños del abril español del Covid-19, quizá, pudiera salir el eslogan: “El futuro es vencer, no sólo es resistir”
Los niños y niñas que ayer salieron a la calle, después de 43 días confinados entre cuatro paredes, quizá, no sólo tenían miedo al presente (23.000 muertos) sino también al futuro (crisis económica).
Por eso, partieron de casa en busca de la vida, el futuro y la libertad. Esta mañana, he escuchado en la radio quejarse de que algunos no cumplían las distancias sociales. ¿Qué sabrán ellos de tal cosa...?.
Eso corresponde a los padres, ellos sólo querían jugar, reír y besar. Ser libres y olvidarse del miedo que caminaba a su lado.
Este ha sido el primer paso del camino hacia la nueva normalidad. Si no hay marcha atrás en la tendencia positiva del contagios del virus, a partir del día 2 de mayo, los mayores también podrían salir a pasear.
Manteniendo las distancias de seguridad, cautela y responsabilidad para no retroceder en lo conseguido. Por ejemplo, ser Huelva la provincia andaluza más limpia de coronavirus.
Es una semana decisiva. Los buenos datos en todos los países del mundo, permite a Europa comenzar en serio la desescalada.
Se anuncia que en Otoño ya habrá un tratamiento eficaz y que, con suerte, los tres Reyes Magos nos podrían traer de regalo a la humanidad tres vacunas contra el virus, que están a punto de terminarse por científicos en EE UU, China y el Reino Unido.
Mi rey preferido siempre ha sido Melchor, pero, en este caso, no tengo preferencias. Me valen las tres vacunas. ¡BUENOS DÍAS!