Jaén con el Papa
La Diócesis de Jaén traslada al Papa su cariño y su adhesión
Don Amadeo Rodríguez Magro, le ha trasladado que Jaén lo quiere, que reza por él y le ha mostrado su adhesión más inquebrantable a su Pontificado.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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En la Plaza de San Pedro del Vaticano, en la audiencia que cada miércoles ofrece el Papa, al pasar el Santo Padre junto a los fieles congregados, se escuchaba al unísono, un fuerte ¡Jaén con el Papa!, el que han coreado los diocesanos que se encuentran en una peregrinación a Roma organizada por la Diócesis, y a la que se han sumado los seminaristas. Al bajarse del Papa móvil, el Sumo Pontífice ha saludado y hablado brevemente con algunos de los seminaristas congregados en San Pedro. Los jóvenes les han explicado que eran unos seminaristas de Jaén, a lo que el Santo Padre, en un tono bromista, les ha espetado que si aún sigue habiendo seminaristas en Jaén.
Tras la catequesis de hoy, en la que el Papa ha hablado sobre la vida, en concreto sobre el Quinto mandamiento. El Sumo Pontífice ha defendido la vida desde el momento mismo de la concepción. Del mismo modo ha expresado: "¡no desprecien la vida! La vida de los demás, pero también la suya propia, porque incluso para ella vale el mandamiento: “No matar”. Hay que decirles a tantos jóvenes: ¡No desprecien su existencia! ¡Deja de rechazar la obra de Dios! ¡Tú eres obra de Dios!". Antes de concluir su catequesis, el Papa Francisco expresó sus saludos a los peregrinos de lengua española, en modo particular a los grupos llegados de España y América Latina. “Los animo a que siguiendo el ejemplo de Jesús, que vino a dar su vida por nosotros, sepamos acoger y proteger la propia vida y la de los demás en el nombre de Dios Padre".
Al finalizar la catequesis, el Papa Francisco ha saludado a todos los Obispos y Arzobispos que lo han acompañado en la audiencia, entre ellos a nuestro Obispo, Don Amadeo Rodríguez Magro, quien al acercarse al Santo Padre, éste le ha recordado su anécdota con los seminaristas de Jaén. A la vez, el Prelado le ha trasladado que Jaén lo quiere, que reza por él y le ha mostrado su adhesión más inquebrantable a su Pontificado.