GASTRONOMÍA
Jamón ibérico: lo que debes tener en cuenta antes de comprarlo y que no te engañen
Los españoles somos muy de jamón de pezuña negra, sobre todo en estas fechas donde las ventas se disparan y las ofertas son multitud, pero ¿sabemos cómo comprar un jamón ibérico?
Jaén - Publicado el - Actualizado
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Jamones hay para todos los gustos y bolsillos. Ibérico, blanco, serrano, con denominación de origen protegida, con indicación geográfica protegida... En el mercado puedes encontrar multitud de variedades de distintas zonas del país con las que deleitar a los paladares más exigentes.
El jamón es sin duda unos de los productos que más identifican nuestra cultura culinaria. Con la navidad a la vuelta de la esquina, en ninguna celebración puede faltar un buen plato de jamón, acompañado de unas regañás, unas almendras fritas o un tomate del terreno picado con un buen chorro de AOVE. Un manjar.
A la hora de comprar un jamón debemos diferenciar entre jamón serrano y jamón ibérico. El primero procede del cerdo blanco, mientras que el segundo está elaborado con cerdos de raza ibérica que se alimentan de forma específica y cuyo proceso de elaboración es más artesanal que el del jamón serrano.
Los españoles somos muy de jamón de pezuña negra, sobre todo en estas fechas donde las ventas se disparan y las ofertas son multitud, pero ¿sabemos cómo comprar un jamón ibérico?
Lo primero que tenemos que tener claro es que la Norma del Ibérico establece las características de calidad que deben reunir los productos procedentes del despiece de la canal del cerdo ibérico comercializadas en fresco, así como el jamón, la paleta y la caña de lomo ibéricos, y tiene como objetivo una correcta y leal competencia de los mercados y asegurar la defensa de los consumidores, evitando fraudes y distorsiones de la competencia con otros productos porcinos, que no responden a las expectativas del consumidor que busca la calidad de los productos derivados del cerdo ibérico.
Para no caer en engaños o posibles fraudes, en la etiqueta de un jamón ibérico encontraremos la denominación de venta formada por la descripción del producto seguida de la alimentación y manejo del animal y por último de su porcentaje racial:
ASdemás, tanto los jamones como las paletas ibéricas llevan un precinto de distinto color para cada denominación de venta:
Así todas las piezas ibéricas (jamones y paletas) van marcadas con un precinto identificativo que nos indica el % de raza ibérica que tiene el animal del que procede, una información que se encarga de certificar que ha estado sujeto a los más exigentes controles de calidad, desde el nacimiento del animal hasta que el producto sale a la venta. Sin ella el producto no puede considerarse ibérico y por tanto comercializarse como tal.